El militar que murió producto de un disparo que recibió cuando uno de sus compañeros manipulaba un arma de fuego, tipo escuadra, se encontraba en la ciudad disfrutando un día franco. Hace varias semanas arribó junto con un grupo de elementos para concentrarse en el Subcentro de Adiestramiento en Operaciones de Selva y Anfibias de Xtomoc, donde tomaba un curso para convertirse en integrante del Cuerpo de Fuerzas Especiales.
De acuerdo con información recabada, al menos tres integrantes del Ejército Mexicano que participaban en Xtomoc, se trasladaron a Chetumal y estuvieron conviviendo e ingiriendo bebidas embriagantes en varios bares de la ciudad.
Según una de las dos versiones proporcionadas por las autoridades, fue en el bar localizado en la calle Isla de Capri con Palermo, donde uno de ellos comenzó a manipular su arma de cargo, pero en un descuido accionó el gatillo, impactando en su compañero.
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Los militares lo subieron a un taxi para llevarlo al Hospital General de Chetumal, pero al llegar y ver que ya no contaba con signos vitales, descendieron de la unidad y huyeron a bordo de otra unidad que los llevó a la terminal de ADO.
El taxista que transportó a los militares hasta el nosocomio pidió apoyo a sus compañeros a través de un grupo de WhatsApp, alertando que los uniformados pretendían escapar, pues su plan era dejar al lesionado y que la misma unidad los llevara a la estación, pero no contaban que su compañero fallecería durante el trayecto.
La Policía Ministerial y la Guardia Nacional desplegaron un operativo y lograron asegurar a dos personas que coincidían con las características proporcionadas por el taxista, quien también quedó a disposición de las autoridades por el delito de encubrimiento.
Una segunda versión señala que el incidente ocurrió durante el trayecto a bordo de un taxi hacia el bar “El Milagro”, ubicado en la avenida Benito Juárez, en dirección hacia “Veider”, por lo que pidieron al chofer que los llevara al Hospital General al resultar su compañero herido.
Los dos elementos quedarán a disposición de autoridades militares, pues serán sancionados con base en lo establecido en la Ley Militar y su proceso se dirimirá ante esta instancia, aunque la Fiscalía apoya con la necropsia de ley que permita establecer la causa del fallecimiento.
Es importante señalar que las autoridades descartaron que los militares estuvieran jugando“ruleta rusa”, debido a que el arma que portaban era tipo escuadra y no un revolver con el que se realizaba ese tradicional juego mortal.
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