Las autoridades no encuentran una estrategia efectiva para erradicar a los extorsionadores, quienes afectan a pequeños, medianos y grandes empresarios en los últimos años. Algunos se vieron en la necesidad de cerrar sus negocios ante la presión y las amenazas que ejercen los delincuentes, quienes actúan más rápido que la Fiscalía General del Estado (FGE), dependencia encargada de recibir, dar seguimiento y resolver las querellas interpuestas ante cualquier delito. Otros comerciantes no corren con la misma suerte y, esperando esa justicia, perdieron la vida.
“Miches Las Medusas” es un local cuyos propietarios decidieron suspender sus labores de manera indefinida. En un comunicado publicado en sus redes sociales, mencionaron que no iban a arriesgar a sus trabajadores, quienes ya fueron intimidados.
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A la larga lista se suma el local ubicado en el fraccionamiento Haciendas Real del Caribe, Supermanzana 200, mismo que era frecuentado principalmente por jóvenes, quienes pasaban un rato agradable. Los propietarios habían apostado todo para crecer, alcanzar popularidad y seguir prosperando, hasta que fueron visitados por extorsionadores quienes, en repetidas ocasiones, los amenazaron de muerte.
Teniendo como antecedente los ataques en bares ubicados sobre transitadas avenidas, clientes y empleados llegaron a perder la vida en medio de la guerra entre el narco, y donde se supone que hay más presencia policiaca, tomaron la decisión de no exponer a nadie y cerraron sus puertas, despidiéndose a través de sus redes sociales y explicando aquellos los que frecuentaban las razones.
“Tú eres la magia en nuestra Navidad, pero desafortunadamente no todo es bueno, ya que han estado invadiendo la integridad y la seguridad de nuestro equipo, por lo que nos vemos en la necesidad de cerrar las puertas de tu casa, Las Medusas Cancún, por tiempo indefinido, para poder estar a salvo todos, con paz y tranquilidad. Esperamos de corazón que la seguridad en Cancún mejore y podamos volver a encontrarnos para seguir compartiendo recuerdos y más diversión”, expusieron.
En el estado, por cada 10 mil negocios, 7 mil 527 fueron víctimas de la delincuencia en este 2024, de los cuales en el 25 por ciento se cometió extorsión, hechos que ocurrieron en la calle, en el establecimiento o por cobro de piso. De estos casos, en el 67% se entregó el dinero solicitado, según detalla la estadística más reciente del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), con base en la Encuesta de Victimización de Empresas (EVE).
El estudio agrega que más de mil negocios de cada 10 mil fueron presa de la extorsión por miedo a ser víctimas de la violencia de organizaciones criminales de alto impacto. Mientras que en 2023, 140 comercios en la entidad fueron blanco de ataques, donde 13 personas resultaron heridas y 54 empresarios fueron asesinados.
En los últimos cinco años, ha sido notorio cómo la delincuencia organizada ha ido abarcando terreno y extinguiendo fuentes de empleo con las extorsiones, ya que cientos de empresarios han tenido que cerrar sus negocios y emblemáticas avenidas van quedando a oscuras, abandonadas, casi en ruinas.
Este escenario también se ha visto en las unidades habitacionales, donde emprendedores gastan sus ahorros para iniciar un negocio con la finalidad de formar un patrimonio, y al ser amedrentados por extorsionadores, cierran, ya que los pagos por derecho de piso a veces suelen ser más altos que las ganancias.
