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Yucatán

Cenoteros de Homún piden a juez sancionar el desacato

A la medianoche del martes venció el plazo improrrogable para que la mega granja porcícola de Homún sacara a los cerdos y dejara de operar, lo cual no ocurrió, por lo que los miembros y abogados de la organización Ka’anan Ts’onot (Guardianes de los cenotes) pidieron ayer a la juez que castigue el desacato en que han incurrido las autoridades y los empresarios, mediante la imposición de una multa de hasta 30 mil salarios mínimos (que pagaría el erario), además de que se inhabilite a funcionarios (Gobernador, titular de Seduma y alcalde de Homún) y que haga uso de la fuerza pública.

Lourdes Medina Carrillo, abogada de la organización, detalló que ayer mismo, cuando se venció el plazo para cumplir con la suspensión definitiva, le solicitaron a la Juez 4º de Distrito lo siguiente:

—Que dé vista a la gente del ministerio público federal para que inicie carpeta de investigación pertinente, porque es un delito penal al no acatar la decisión judicial.

—Que se proceda contra autoridades por desacato.

—Que haga uso de los diversos medios para hacer cumplir sus determinaciones y multe a las autoridades (con hasta 30 mil días salarios mínimos de la Ciudad de México)

“No se pagarían de la bolsa del gobernador o del empresario, sino del erario”, dijo

—La jueza puede hacer uso de la fuerza pública y la que le corresponde es el ejército

—Que se inicie el incidente de inejecución que es que por desacato y se inhabilite a los funcionarios por ahora y para el futuro.

La abogada y los miembros de la organización descalificaron las acciones y declaraciones de los diputados locales que ingresaron a la granja el lunes pasado; también pidieron al empresario que afirma haber sido extorsionado a que interponga la denuncia correspondiente y dé nombres.

Kekén pidió 3 semanas y ya pasaron

La abogada hizo un recuento del caso y comentó que en el expediente se plasmó la intervención de Grupo Porcícola Mexicano, conocido como Kekén, el 11 de octubre, como tercero interesado, ya que los cerdos son suyos y dijeron que con 3 semanas era “tiempo suficiente para sacarlos”; sin embargo, siguen adentro.

“No fueron sólo 5 días para sacar los cerdos de la granja y por lo tanto es una medida imposible de cumplir, como dijo Ricardo Días Montes de Oca. El amparo de 6 niños de Homún se promovió el 28 de septiembre. El 1 de octubre se dio una suspensión provisional para paralizar las actividades de la granja, entendiendo sacar los cerdos para que no opere.

“El 9 de octubre se dio la audiencia y se dio la suspensión definitiva, porque hubo una inspección judicial que determina dar la suspensión definitiva para paralizar las operaciones de la granja. El 23 de octubre se vuelve a ratificar la suspensión y se especifica por la jueza porque la empresas Kekén aparece y piden prórrogas que la paralización del funcionamiento de la granja significa quitar los cerdos; se los explica y les dice que deben tratar las aguas y les dio 5 días improrrogables; llevan 38 días para acatar la suspensión, no 5 días”, dijo la abogada.

Comentó que fue el 11 de octubre en un escrito firmado por el representante de Grupo Porcícola Mexicano, Kekén, Gabriel Antonio Novelo Rosado, que eran terceros interesados, diciendo que son parte porque tienen un contrato de aparcería con la granja y piden que les concedan 3 semanas, las cuales para Kekén eran tiempo suficiente para sacar a los cerdos para colocarlos en otras granjas.

“Del 11 de octubre a hoy son casi 4 semanas y los cerdos siguen adentro. No hay voluntad de cumplir ni de la empresa ni de autoridades y todo esto es solapado, es una burla y es muy delicado porque es el Congreso del Estado, es una burla que no se cumpla.

“Desde el 1 de octubre era reiterada la decisión judicial y que las autoridades debían cumplir y no lo han hecho de manera notoria y contundente y solapada por el Congreso del Estado”, reiteró la abogada.

35 mil cerdos en 21 días

Recordó que en el propio expediente Kekén dijo que los cerdos ingresaron entre el 16 y 17 de septiembre y al 8 de octubre tenían 35 mil cerdos en la granja, cuando desde el 1 de octubre se determinó la suspensión provisional.

“Dicen que en 40 días metieron los cerdos, es una mentira porque en el juicio dijeron que el 16 o 17 de septiembre empezaron a meter los cerdos, para el 8 de octubre reportaron tener en toda la capacidad actual la granja, esto por manifestaciones hechas por Kekén hay 35 mil cerdos, los metieron del 16 de septiembre al 8 octubre, son 21 días para meterlos. Desde el 1 de octubre violaron a suspensión provisional y los siguieron metiendo”, dijo la abogada.

Lo que viene

En los próximos días la juez emitirá las acciones a seguir y así como la organización ingresó su escrito ayer mismo, se supone que la empresa hizo lo mismo.

José May Echeverría, de la organización de cenoteros, leyó el comunicado que emitieron ayer:

“En pleno desacato, respaldando la violación al mandato judicial en el que incurre la empresa, una Comisión de diputados y diputados que parece maniobrar a favor de la empresa porcícola, visitó las instalaciones el pasado lunes y expresó opiniones favorables a la operación de la megagranja.

“Las y los diputados insisten en desconocer o ignorar la determinación del pueblo de Homún, que rechazó la megagranja porcícola a través de una consulta organizada por el propio pueblo maya en ejercicio de su libre determinación. Los resultados de esa consulta se entregaron a la actual legislatura. El pueblo de Homún no sólo no ha autorizado, sino que ha manifestado su rechazo a la operación de una megagranja de tales dimensiones en plena zona de recarga del anillo de los cenotes”.

Agregaron que no se puede entender la visita de las y los diputados sino como una maniobra de la empresa para burlar la determinación judicial y la decisión del pueblo de Homún.

“La insistencia del Congreso en ignorar la determinación del pueblo de Homún, muestra un absoluto desdén y desconocimiento de los derechos del pueblo maya que pone en riesgo, no sólo a Homún, sino a todo el pueblo maya de Yucatán. El Congreso del Estado parece burlarse de la autoridad judicial, al participar en una visita a una granja cuyo funcionamiento implica un desacato a la juez cuarta de distrito y una maniobra tramposa de la empresa para desobedecer la orden judicial.

“La empresa, por su parte, recurre a prácticas ominosas. Los Guardianes de los Cenotes denunciamos enfáticamente a representantes y dueños de la empresa que han acusado a “cenoteros” de haberles pedido millones de pesos. Al señor Ricardo Díaz, que lo ha dicho y reiterado, le exigimos decir quién dicen que les extorsionó e interponer la denuncia correspondiente, pues no es posible cobijarse en la impunidad de quien sugiere pero no concluye su afirmación ni señala ni prueba. Difamaciones y calumnias que no se concretan pero que resultan en una de las prácticas más deleznables que, lamentablemente, se utilizan con frecuencia en contra de los pueblos indígenas que defendemos el agua, la tierra y el medioambiente, tal como ha señalado la Relatora de Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas”.

Recordaron que el pueblo de Homún, como pueblo maya, tiene derecho a la libre determinación, a decidir sobre su territorio y sobre cualquier proyecto que pretenda desarrollarse en él, más aún cuando se trata de actividades que tienen o pueden tener un impacto directo en su pueblo, su forma de vida y sus recursos naturales, así como los espacios con los que mantenemos un vínculo tan estrecho como son los cenotes.

“La megagranja ha incurrido en irregularidades para establecerse y operar sin autorización de la comunidad en territorio de un pueblo maya y en plena zona de recarga del anillo de los cenotes. La tecnología apropiada por supuesto debe exigírsele a las granjas y mega granjas pero ¿por qué en Homún? ¿Por qué en la zona más sensible para el agua?

“Homún ha decidido no ser el espacio de prueba ni poner en riesgo la salud de la población y nuestros recursos naturales. En cambio hemos decidido defender a la infancia, nuestros cenotes, el agua y el derecho de nuestro pueblo a decidir sobre nuestra vida y nuestro territorio”.

(Verónica Martínez)

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