Roldán Peniche Barrera
Yucatán Insólito
Es lenguaje tabernero y sólo lo hemos escuchado en nuestra península. Pero es posible que en otros Estados de la República se emplee con la misma idea que es: la continuación de una borrachera después de haber concluido otra.
No es el empate beisbolero entre dos equipos de la Liga Mexicana ni el empate de dos corredores en un maratón, sino simplemente lo ya dicho. Conocemos a individuos que presumen de haber “empatado” pues salieron de una cantina medio ebrios y se metieron en otra para seguir la farra.
No lo citan los diccionarios regionales.
Veamos un ejemplo:
-¿Han visto a mi mecánico el Gasolina?
-No, Museólogo -contesta el tío Pascual- Hace días que no se le ve.
-Lo necesito para que aceite mi veleta que anda quejándose…
-No lo he visto a él ni al Dr. Gorgojo hace rato.
-¿Y por qué incluyes al Dr. Gorgojo? Yo hablo del Gasolina.
-Bueno, es que la última vez que los vimos andaban juntos y bien persos…
-¡Qué raro…!
-Y además andaban presumiendo que al mediodía visitaron al Mulix y ahí se quedaron hasta las cinco. Pero harto de escucharlos, los sacó a patadas y los dos se fueron al México Lindo donde siguieron la farra…
-¡Desgraciaos, malnacidos… la “empataron”!