Pequeños y medianos ganaderos podrían reducir entre 15 y 50 por ciento los gastos por alimentación de animales al implementar sistemas silvopastoriles, lo que les permitiría ser más competitivos de frente a las grandes cadenas productoras de carne y leche, afirmaron investigadores de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
El profesor investigador de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Juan Carlos Ku Vera, recordó que Yucatán cuenta con 24 diferentes especies arbóreas que pueden servir como alimento al ganado, entre las que mencionó leucaena, pich, tzalam, jabín, ceiba, pich y ramón, esta última utilizada desde hace más de 30 años.
Los costos de los alimentos tradicionales para el ganado presionan al productor en competitividad y rentabilidad, aseveró, y como ejemplo dijo que la soya ronda los nueve pesos por kilo y el maíz los cinco, pero al comprarse en grandes cantidades representan una erogación importante que impacta en el costo de la producción ganadera.
Entonces, añadió, en la búsqueda de conseguir ahorros mediante raciones más económicas, desde la UADY se divulga la información para que los pequeños y medianos productores implementen sistemas silvopastoriles.
Mejor calidad
Ku Vera señaló que las especies mencionadas aportan entre un 13 y 24 por ciento de proteína a los animales, similar al que ofrecen los víveres tradicionales, pero con el beneficio de que permite mejorar la calidad de la carne, leche y los productos derivados.
Asimismo, hizo hincapié en que los sistemas silvopastoriles (también conocidos como climáticamente inteligentes), ofrecen una alimentación con la mayor calidad de nutrientes a los bovinos, ovinos y caprinos, mientras se da un uso eficiente a la vegetación nativa del Sur de México, que permite la crianza de ganado de calidad.
Por ello, después de más de 25 años de investigación, han llevado esta técnica a ranchos de Yobaín, Tizimín, Tzucacab, Catmís, Dzemul y comisarías de Mérida; asimismo, lo han transferido a productores de Jalisco y Michoacán, y próximamente lo harán con Chiapas y Tabasco mediante una estrategia de visitas guiadas a líderes ganaderos para que conozcan los ranchos Kapepem y Hobonil, donde se utilizan estos sistemas de alimentación.
Es así como en días pasados líderes de Campeche integrantes del proyecto “Biopasos”, el cual busca la conservación de la biodiversidad con buenas prácticas ganaderas, realizaron un recorrido guiado por el rancho Kapepem, donde conocieron el vivero de árbol de ramón, el sistema de plantación de vegetación y la alimentación de las distintas especies, explicó el coordinador Edwin Pérez Sánchez.
Esas visitas no sólo son para ganaderos, investigadores o universitarios, comentó, ya que se planea realizar algo similar para estudiantes de educación básica, e incluirán actividades interactivas que les permitan acercarse y hacer más atractivo este sector productivo.
Visitas escolares
El doctor Javier Solorio Sánchez, investigador de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, dijo que se espera llevar a cabo de tres a cuatro visitas escolares al mes, con niñas y niños de todos los grados escolares, principalmente de comunidades rurales.
El objetivo es mostrar a los estudiantes la forma en que dentro de esta granja se producen productos como leche, queso, yogurt y huevo, además de los frutos que se siembran y la forma en que alimentan al ganado con las plantas antes mencionadas, precisó Solorio Sánchez.
“Queremos montar una exposición mostrándoles el proceso de producción no sólo para hacer más atractivo el sector. Queremos que los niños y adolescentes sientan el mismo interés, pues nosotros ya vamos de salida, ahora debemos buscar que se acerquen a la ganadería”, concluyó.