Yucatán

Yucatán contribuyó al calentamiento global al deforestar el 40% de sus selvas

Jorge Urdapilleta Carrasco, subdirector en Mérida de la Dirección Regional Sureste del Conacyt, dijo ayer que Yucatán ha contribuido al calentamiento global porque ha deforestado el 40% de sus selvas.

Enfatizó que requerimos un cambio de paradigma para dejar de anteponer lo políticamente correcto y lo económicamente rentable a lo ecológicamente viable y a lo socioambientalmente justo.

Asimismo explicó que la Curva de Keeling mide el aumento de partes por millón del CO2 (dióxido de carbono) que provoca el calentamiento global y nos va mostrando cómo desde 1958 a la fecha hemos llegado a un nivel de 415 partículas por millón de CO2 (dióxido de carbono) en la atmósfera. Y se calcula que si la humanidad llega a 450, ecológicamente será muy difícil que se pueda revertir, porque el sistema solito se va a estar alimentando.

–¿Cuándo empezó esa curva?

–Keeling empezó a medir desde 1958 para acá. Estas mediciones se realizan desde el Observatorio Mauna Loa y el nivel normal estaba en 285 partes por millón, y se relacionaba ya con el incremento de la temperatura, pero en 2008 subió a 380 ppm, en 2014 llegó a 400, en 2015 a 404, en 2016 a 409, y este año a 415. Llegar a 450 es llegar a un punto de no retorno.

En aumento

En otras palabras ha ido aumentando la cantidad de CO2 (dióxido de carbono) que hay en la atmósfera. Y el CO2 tiene que ver tanto con las emisiones que generamos como humanidad por los procesos industriales, como también con la disminución de las áreas forestales y los otros mecanismos, por ejemplo, también el mar interviene, que ayudan a que se absorba el CO2. Entonces si tenemos menos absorción y mayor emisión, pues sigue aumentando el CO2, y también la Curva de Keeling.

–¿Puede explicarnos con mayor amplitud qué es el CO2?

–Nosotros cuando respiramos, sacamos CO2, pero no nada más es nuestra respiración y la de otros animales, sino también hay que agregar toda la quema de combustibles, que también están generando mucho CO2, además de otros gases de efecto invernadero.

El CO2 aumenta porque hay menor absorción y porque estamos generando más. Entonces qué pasa si el 40% de la selva de Yucatán ya desapareció. Eso quiere decir que el 40% de lo que deberíamos estar absorbiendo de CO2, ya lo dejamos de hacer. Y eso además tiene que ver con qué mecanismos se están tomando en las ciudades para decir: bueno, vamos a incorporar cada vez más áreas verdes, vamos a privilegiar eso. Entonces esa es parte de la gravedad.

En 15 años

–¿En cuánto tiempo se podría llegar a esa cantidad límite de 450?

–Bueno, según la estimación que acabo de presentar podríamos llegar dentro de 15 años. Varía, porque el aumento puede ser de 2 o 3 partículas por millón anuales. Entonces por eso les mostraba que en el 2008 teníamos 380, y en este momento ya tenemos 415. Entonces esto es algo de lo cual se tiene que hablar, y realmente se tienen que tomar acciones. Me parece que en el caso de la ciudadanía, realmente se tienen que tomar acciones. Sería como realmente empezar a decir: bueno, ¿cómo le hacemos para generar más plantas? Por ejemplo, en la Ciudad de México, con lo que hubo de la contingencia ambiental, mucho se habla de que si es una cuestión de que si hay más o menos presupuesto. Pero lo que más bien tenemos que ver es qué tanto está uno dispuesto a poner plantas en mi azotea, lo que se llama azoteas verdes. Son acciones simples que como personas podemos hacer, pero nos negamos porque queremos seguir en la comodidad.

Trauma ambiental

Y sobre todo para las generaciones jóvenes ya se está viendo los efectos psicológicos de trauma ambiental, de que realmente están viendo como un futuro negro, y eso ha llevado a todas las manifestaciones de niños y niñas en Europa, por ejemplo. Entonces realmente es un tema de que o lo abordamos o colapsamos. Es fuerte decirlo de esa manera, pero así es y no soy el único que lo ha dicho de esa forma.

Cómo lo perciben las personas

Acabo de comentar las estimaciones del 40% de selva que se ha perdido en Yucatán, pero más bien me movería a cómo las propias personas lo están percibiendo hoy; hace rato hablé con un taxista que me decía que cuando era niño le gustaba jugar bajo la lluvia abundante, pero ahora no es así.

Entonces podemos ver que cada vez hay más espacios con pavimento. Las ciudades están creciendo cada vez más, no se están tomando ciertas previsiones en algunos fraccionamientos para incorporar áreas verdes y captación de agua. No se están reabasteciendo los mantos freáticos y además se están contaminando mucho, y de ahí es de donde se está obteniendo el agua para la ciudadanía. Entonces el cambio climático les transmito que es algo más que cómo se está subiendo la temperatura. Es algo que nos afecta de distintas maneras. También es hablar de la cantidad de especies que se están perdiendo, la reducción de abejas que nos podría llevar a perder los cultivos, etcétera

También estamos buscando que en los proyectos que se financien haya una mayor incidencia social, y que se utilice el dinero de la manera más eficiente posible. Y en esa eficiencia, que podremos llamar como austeridad, más bien tenga que ver con invertir en procesos que se pueda compartir toda esta información con diferentes sectores de la sociedad. Que no nos quedemos nada más en las publicaciones de alto arbitraje, sino que también pueda haber documentos o procesos o esquemas de difusión social de la ciencia. Esa es la parte en la cual Conacyt puede influir.

Medidas

–¿Qué medidas se necesitan ahora?

–Modificar la matriz energética, las fuentes que utilizamos para generar energía. Tenemos que pasar de ver como que la solución la tiene que dar el gobierno y tenemos que empezar a asumir que la tenemos que dar los ciudadanos y las empresas. Si tuviéramos una visión de bien común, de ayuda mutua, entonces diríamos todos: vamos a trabajar juntos por la reforestación y para aplicar medidas contra el cambio climático.

(Roberto López Méndez)