La remodelación de la terminal de autobuses, conocida como TAME, lleva un avance del 80 por ciento y se prevé terminar los trabajos en octubre para unir las dos terminales (CAME y TAME), con lo que habrá un flujo de 500 mil pasajeros al mes, informó ayer Eduardo Córdova Balbuena.
En entrevista con POR ESTO!, recordó que este proyecto se inició hace 5 años y los permisos de remodelación se obtuvieron en la segunda mitad del 2018, que fue cuando iniciaron los trabajos.
La remodelación de la terminal recupera las “sombrillas invertidas” de la antigua, que data de la década de los 70; el patio de camiones será flanqueado por las fachadas de las casonas que hay sobre las calles que rodean la terminal, y toda el área de pasajeros estará climatizada con espacios para las zonas premium.
La inversión es de 100 millones de pesos por parte del Grupo ADO y será la remodelación más moderna que se haya hecho en una terminal del país.
Unificación
“Trabajamos en la unificación de las terminales, sobre la terminal más antigua, que es la TAME, que es de la década de los 70; se fusionan las dos terminales y habrá una imagen envolvente y se respeta la arquitectura de las sombrillas invertidas, pero son la modernidad de salas de intermedio, de primera clase y de lujo.
“Con la fusión de las terminales tendremos un flujo promedio mensual de pasajeros de 500 mil; en la terminal de TAME veíamos a turistas internacionales con mucha frecuencia, porque en esa terminal es donde salen las rutas para los Pueblos Mágicos (Valladolid e Izamal) o para los cenotes, para las playas; ahora todos estarán en una sola terminal. Tendremos además una arquitectura como aeropuerto, con doble altura, donde daremos servicios de alimento y de bebida, estarán las oficinas de administración y, en la parte de arriba, las salas de capacitación, el comedor y la zona relax para los trabajadores; vamos en un 80 por ciento de avance”, dijo.
La nueva terminal tendrá el estacionamiento en su interior y, cuando los trabajos estén finalizados, la terminal CAME se cerrará y en un futuro analizarán qué se hará con el predio, aunque reconoció que han recibido ofertas de tiendas de autoservicio y de cines, entre otros.
Rescate de casonas
La remodelación contempla la recuperación de fachadas de las casonas que están a espaldas de la terminal, cuya propiedad es del Grupo ADO, con excepción de dos, y el objetivo es resanarlas, pintarlas y hacer lo mismo al interior, para que el pasajero que llega o se va experimente en el patio de camiones la sensación de las casas de Mérida.
La nueva terminal también albergará el Turibús y preparan tours de sabores por la ciudad, con la degustación de alimentos y tours de cerveza yucateca.
“Para octubre esperamos estar cortando el listón, pero más allá de una terminal remodelada, lo que queremos es que se sienta que es una puerta a la historia y la calidad de vida de Mérida”, dijo.
Resaltó que la remodelación de la terminal responde al crecimiento del flujo de pasajeros de un 10% promedio anual, y a los cambios que registra el Estado.
Recordó que el Grupo ADO en la región peninsular cuenta con 700 autobuses, que forman parte de los 5 mil autobuses de todo el corporativo a nivel nacional.
Aunque los trabajos comenzaron el año pasado, la terminal no ha dejado de operar y por ahora ya funciona una parte de las nuevas taquillas, el área climatizada de los pasajeros y los pasillos de abordaje.
El Grupo ADO en esta región cuenta con 1,800 colaboradores de todas sus áreas.
(Verónica Martínez)