PROGRESO, Yucatán, 14 de julio.- Los comerciantes de pescado frito y mariscos del mercado municipal de este puerto, han incrementado sus ventas con la llegada de los veraneantes en este segundo domingo del mes de julio, donde los visitantes están dejando una excelente derrama económica.
Ruby Martínez Rubio y Felipe Martínez Vizuet, comerciantes de pescado frito del mercado municipal, dieron a conocer que el mero este domingo apareció de nueva cuenta en el mercado municipal a 180 pesos el kilo, seguido del boquinete, cuyo precio está igual que el mero (180 pesos kilo), la mojarra a 150 pesos el kilo, al igual que el kilo de posta, que se comercializó en 150 pesos y la ración a 70 pesos el kilo.
Explicaron que este domingo de verano sus ventas han mejorado con la llegada de visitantes del interior del Estado y nacionales, que llegan a las costas de Progreso a degustar pescado frito en el Puerto, es prácticamente una tradición su consumo al venir.
El precio del pescado en el caso del mero está escaso y su precio es de 180 pesos kilo, que está accesible al bolsillo, precio que iguala el boquinete un pescado de mucha calidad para los paladares exigentes.
Teniendo el caso de los clientes que por costumbre piden a consumir el mero, también piden esmedregal en postas, el cual ahora no está en el mercado, por su precio, pero hay otras especies como son la sierra, róbalo, coronado, rubia, mojarra blanca y pargo, cuyo precio es de 160 pesos el kilo, son especies para degustar por los visitantes.
El verano es una de las mejores fechas para los comerciantes de este Puerto, dedicados a la venta de pescados y mariscos, especie que disfrutan, tal es el caso de que el producto ha sido supervisado por inspectores del sector salud y la lista de precios cumpliendo indicaciones de la Profeco, se han fijado en lugares visibles las listas de precios de los productos que comercializamos.
El producto que ofrecemos al cliente, se le permite tocarlo para conocer su consistencia de la carne, el olor, antes de meterlo a la freidora se le muestra la calidad de la especie que está por degustar.
Hay pescado para la fritura, no es abundante como otros años, aunque parte de este lo capturan los pescadores de la ribera y otra parte viene de los pescadores de mediana altura cuando retornan de su jornada nos comercializan sus especies del mar.
Al mercado municipal acuden clientes para la compra de pescado frito, cual consumen en el inmueble o lo compran para llevar a la playa y pasar un buen convivio en familia, pero el precio aún está al alcance de sus bolsillos, debido a que hay pescados de los llamados sartén de unos 30 centímetros, cuyo precio es más económico para disfrutar en este verano.
Lamentablemente, las autoridades de salud mienten que sean varios puntos del puerto que comercializan pescado sin las normas que nos exige al comercio establecido, como es la higiene y, de manera inexplicable, permiten que estas pescaderías temporales funcionen a lo largo de la costa.
(Julio Jiménez Mendoza)