TIZIMIN, Yucatán, 20 de enero.- Como es costumbre, mientras desmantelaban los denominados tablados mucha gente aprovechó y vino a comprar el huano y la madera que ofertaban al 50 % fluctuando el costo de principales o largueros de 7 a 8 metros entre 120 y 150 pesos, celosías de aproximadamente 50 piezas entre 80 y 100 pesos, giles a 10 pesos cada uno o en rollos de 10 entre 80 y 100 pesos el rollo de 10, los balos de 4 metros entre 80 y 90 pesos, así como la palma de huano entre 2.50 y 3 pesos la pieza.
Entre la madera las personas podían encontrar la proveniente de xuul, kanasín, bob, jabín, bohom, kitanché, sakhuinkilché, sakbuklunché, entre otras que son muy resistentes porque como secreto ancestral han sido cortadas dos días antes de la luna llena, por lo que se vuelven más duras y no le entra comején, coincidiendo quienes desarrollaban las labores de desmantelamiento del coso que si las arman muy bien ni el ciclón las rompe.
Los tablones los resguardaron los palqueros para que les sirva el próximo año, compartiendo que el bejuco es el único que desecharon y que las personas aprovechan las maderas porque cuentan con permisos para transportarlas.
Además de mencionar que sirven para tinglado o casa de huano, o para los corrales en vez de varengas, pues tienen un costo más barato.
Es así como se realizó el desmantelamiento del coso artesanal, entre sentimientos de tristeza y nostalgia por haber concluido su ciclo de vida este año como sede de los festejos taurinos en honor a los Reyes Magos y de alegría por haber atraído a millones de personas que se acudieron a él para disfrutar las corridas.
Como coincidieron Alfredo Méndez Chan, Gabriel Kantún Sulub, Iván Uitzil Castillo, Manuel Medina Borges, Ismael Euán Meneses y la familia Tun Delgado, quienes revelaron que al igual que los palqueros y ayudantes de confianza, desde las 2 de la madrugada y durante el día de este lunes ejercieron estas labores para desbaratar los tablados, “es un lujo y un orgullo, algo sagrado el haber sido por un año más parte de la historia de este coso artesanal, estamos agradecido con Dios”, finalizaron.
(Texto y foto: Luis Manuel Pech Sánchez)