Yucatán

Más del 50% de las calles del Fraccionamiento Las Américas siguen inundadas

El agua alcanza cerca de los 60 centímetros en algunos puntos del Fraccionamiento Las Américas, e incluso predomina el olor a podrido.
Foto: Óscar Suaste.

Poco más del 50 por ciento del Fraccionamiento Las Américas permanecía inundado hasta ayer a las dos de la tarde, especialmente en la calle 98-A por 100-2, donde el agua alcanzaba más de 60 centímetros y olía a pudrición, dijo David Novelo, vecino de la sección Américas 2.

Explicó que dejó estacionado el auto a dos cuadras de su casa para evitar que el agua dañe el motor, como le ocurrió a tres o cuatro vehículos de ese rumbo y que fueron rescatados por una grúa.

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Comentó que había ido a comprar un par de botas de hule para poder caminar con mayor tranquilidad y sin temor a pisar un cable de alta tensión, toda vez que desde el sábado les reconectaron el servicio de energía eléctrica.

Por su parte, Fernando Aguilar manifestó que tal como se esperaba las pipas y bombas para extraer el agua están resultando insuficientes, por lo que demanda la perforación de pozos más profundos, de lo contrario esa zona del fraccionamiento podría seguir inundándose el resto de la semana, sobre todo si regresan las lluvias torrenciales como las de la semana pasada.

Tan sólo en las secciones 1 y 2 hay más de 10 puntos conflictivos donde el agua sobrepasa el nivel de las aceras, éstos son la 57-A por 104, la 57 entre 128 y 134, la 108 entre 55-C y 54, la 124 por 59-D, la 112 hasta la 116 por 55- D, la 59 entre 114 y 116, la 100-2 por 49, que abarca una extensión de 500 metros, la 98-B por 49 y la 106 por 47, donde los vecinos piden que se construya una especie de drenaje para que el agua pueda escurrirse a espaldas de la planta de Maseca.

En ese mismo sector había una persona supervisando las operaciones de extracción de las aguas lodosas, que informó que durante la mañana sólo se habían llenado 10 pipas debido a que éstas tardan más en regresar porque el agua la tiran a unos 17 kilómetros de distancia para evitar que ésta regrese.

Indicó que en otros sectores de la unidad habitacional hay por lo menos ocho grupos de obreros provistos de bombas y pipas que trabajaron toda la noche y siguen sacando agua, pero es muy poco lo que han logrado que el nivel de ésta disminuya.

Luis Demonte, representante de los vecinos de la 98-A, informó que una de sus vecinas de la calle 98-A por 45 le dijo que, debido a las fuertes lluvias, se fue a refugiar a casa de sus padres y al regresar se encontró que todos sus muebles y otros enseres están en mal estado, pero lo más grave es que la banqueta, las paredes y muros se encuentran electrificados.

Otros manifestaron que se les quemó su refrigerador, televisores y hasta las puertas se “inflaron” por el exceso de agua.

Recordó que entre las demandas que presentaron en la reunión del sábado pasado están: una estrategia pública para desalojar el agua de las zonas más afectadas con seguimiento y evidencia, determinar la postura de la inmobiliaria ante los daños por los vecinos, inmuebles y mobiliario, público y privado, cuáles son las medidas de higiene que se van a tomar (aguas y mosquitos), seguridad en las zonas afectadas (evitar la rapiña), propuesta de solución preventiva de la Japay, postura del Ayuntamiento ante la irregularidad de Sadasi, reconexión de la CFE, acciones específicas de la constructora, correctivas no preventivas (firmado por Sadasi).

Por parte del Ayuntamiento, suspensión de obra de Sadasi hasta que se regularice y se expongan todos los estudios/permisos para la construcción del fraccionamiento, conocer cuáles son los servicios públicos municipalizados y cuáles no, aumentar el transporte público, limpieza y recolección de basura, drenaje, la necesidad de peritos (propuesta por escrito).

En el fraccionamiento Xcanacán el panorama fue diferente, pues el agua que inundó las casas en esa unidad habitacional ya desaparecieron.

Por Víctor Lara Martínez