“Autorizar el uso de la marihuana es en realidad abrir una puerta de la cual después los políticos se arrepentirán por el gran daño a las nuevas generaciones”, dijo Luis Solís Pool, integrante del grupo de Alcohólicos Anónimos (AA), y terapeuta autorizado en recuperación de personas con adicciones y alcohólicas en este puerto.
Informó que las personas que llegan a los centros de readaptación, el 90 por ciento son consumidores de cannabis, antes de otras drogas; y el 30 por ciento son alcohólicos.
“Desde luego estoy en desacuerdo con esta ley porque no saben el daño que ocasionarán a las familias; una cosa es con fines curativos y otra es la realidad de legalizar una droga”, señaló.
Explicó que está en desacuerdo y culpó a las autoridades que votaron desde sus curules para “embrutecer al pueblo, especialmente a los adolescentes; demasiado tenemos con el alcoholismo para ahora tener marihuanos. No soy tradicionalista, pero sí realista, no saben que las drogas matan las neuronas del cerebro, que no son remplazables”.
Respecto a los 28 gramos para portar, consideró que “si ahora la juventud está desenfrenada imaginémonos que pasará cuando puedas fumar marihuana…cómo se dispararán los índices delictivos por hacer de algo ilegal, legal”.
“Esta droga sólo es la entrada a las que le siguen, como son las tachas, la piedra y la cocaína, debido a que el ser humano por naturaleza siempre busca más y al autorizarlo desde luego habrá cadenas de hechos violentos que lamentar”, afirmó.
“En mi experiencia, muchos adolescentes drogados me han dicho, ‘padrino cuando me veas drogado no te me acerques, que no soy yo, y te puedo lastimar’, y esto es verdad; una persona drogada es capaz de muchas cosas, que, con legalizarla en los juzgados, dice el homicida, el asaltante, el violador, estaba drogado y no sabía lo que hacía y de esta manera el delincuente obtiene su libertad”.
“Pero vamos a los hechos, en la actualidad en redes sociales y fiestas se venden brownies que tienen marihuana, se los ofrecen a personas, principalmente adolescentes, quienes desconocen el contenido”, criticó.
“Los resultados son terribles, después se han dado casos de embarazos no deseados con jovencitas que son víctima de abuso sexual, al igual que otras personas que han tenido contacto con el cannabis, muchos no denuncian por temor y guardan este lado oscuro del consumo”, expuso.
“Ahora, ¿cómo aplicarán las autoridades las leyes? Si eres arrestado por conductor con aliento alcohólico, ¿también serás detenido por estar marihuana? ¿Si existe un alcoholímetro, habrá una forma de medir tu grado de intoxicación por cannabis? ¿Cómo se aplicarán estas medidas? Porque ambos conductores son de peligro… ¿podrás presentarte hacer deporte drogado?, cuestionó.
También planteó que “¿si en los niveles medio y superior, cuando ya eres mayor de 18 años podrás ingresar a las escuelas drogado? ¿Qué criterios se aplicarán? ¿En la familia cuando llegue tu hijo o hija y te diga tome dos cervezas, ahora te dirán padre me fumé dos churros?”.
“Es lamentable esta situación donde al Gobierno le interesa tener al pueblo drogado, para que acepte lo que desea. Quiero dejar claro, las drogas matan y la marihuana es una droga”, manifestó.
“Desde luego habrá familias que usen sus valores, el trabajo de los religiosos, de los catedráticos en las aulas, de los que nos dedicamos a la rehabilitación de alcohólicos y drogadictos, tendremos muchos casos más para realizar”, dijo.
Por Julio Jiménez Mendoza