La tradición del “puente escolar” se impuso el día de ayer, a pesar de que alrededor de mil planteles de nivel básico acordaron trabajar normalmente en Martes de Carnaval.
Esto se pudo apreciar ayer porque, según reportes de maestros, inspectores y padres de familia que sí llevaron a sus hijos a la escuela, la asistencia de alumnos fue apenas de entre un 20 y un 50%, pero en muchas de esas escuelas donde sí trabajaron los alumnos no recibieron clases, sino que participaron en festivales carnavalescos.
Por otra parte, como se sabe, muchas escuelas simplemente decidieron no trabajar en Martes de Carnaval.
En Mérida quedó definitivamente atrás la vida tranquila y todo ha cambiado tanto que los padres ven el Carnaval como una oportunidad para descansar de la estresante rutina de llevar a sus hijos de lunes a viernes a la escuela, y los alumnos ven ese descanso como una oportunidad de liberarse aunque sea pocos días de las clases y las tareas.
Con información de Roberto López Méndez
Por Redacción Digital Por Esto!