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Amas de casa y jefes de familia de la comisaría meridana de Tixcuytún, que laboraban como empleadas domésticas y albañiles, están sin trabajo a raíz de la pandemia del coronavirus.

Aunque las autoridades recomiendan permanecer en casa, ellos, por falta de recursos, tienen que salir a pepenar todo el pet, chatarra y cartón que encuentran a su paso. Tal es el caso de Ginna Sulú Puc quien sale con su esposo, su suegra y sus dos hijos de 5 y 2 años de edad, respectivamente, a buscar chatarra que luego venden para ganarse, si bien les va 50 ó 70 pesos.

“Salimos a las 6 de la mañana a buscar chatarra, pet, cartón y lo vendemos, pero primero tenemos que recorrer varios kilómetros hacia Cholul, por carreteras, montes y por donde sea para juntar lo más que se pueda; no es mucho lo que sacamos, diario son como 50 ó 70 pesos; el pet lo pagan a 3.50 el kilo, la chatarra como el fierro y el alambre a 3.50 y las latas, a 2.50 el kilo, pero tenemos que prestar el triciclo; gracias a Dios que no nos cobran, pero no tenemos otra forma de ingreso.  Aquí diariamente comemos frijol y tortilla y si alcanza para huevo compramos y si no, no”, indicó la humilde mujer.", indicó la humilde mujer.

A pesar de la contingencia, esta familia como otras diez o un poco más, tratan de protegerse del coronavirus con sus cubrebocas; aseguran que cuando llegan a sus casas se lavan las manos con jabón, se asean y usan gel antibacterial.

“Muchos pudieran pensar que porque vivimos al Norte de la ciudad estas familias están lejos de la pobreza o la marginación, pero eso no tiene nada que ver”, refirió  la comisaria municipal Lizeth May Puc.

“Sería fatal para todos porque somos una comisaría tan pequeña, pues la gente va a los mismos lugares, a las mismas tiendas; tenemos 163 casas en el pueblo y en cada casa hay mínimo dos o tres personas; Tixcuytún está habitado por 500 adultos y 119 niños, y la mayoría de los adultos trabajan de albañiles, jardineros, labores domésticas, pero han perdido sus empleos; llevan más de tres semanas que los retiraron y aquí no hay sembradíos, nadie trabaja la tierra, eso quedó atrás desde hace muchos años, sólo algunas personas tienen sembradíos en sus patios, pero son muy pocos", agregó

“Ahorita mucha gente se quedó sin empleo, amas de casa, albañiles; tengo varias familias que no tienen ingresos y han tomado la opción de ir por chatarra para poder vender y mantener a sus hijos; ese es el problema que estamos teniendo, pero además se arriesgan y arriesgan a sus familias, pero tienen que buscar el sustento; muchos matrimonios tienen hijos, es muy difícil esta situación, por eso estoy pidiendo la ayuda; yo veo en las redes que empresas como Kekén están regalando carne y pollo; por eso quisiera que a través del POR ESTO! nos visitaran y confirmaran por ellos mismos lo que estamos viviendo en Tixcuytún”, añadió.

Por José Luis Díaz Pérez

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