Vamos a esperar qué dirán mañana aquellos que hoy critican a los empresarios que piden al Gobierno Federal un golpe de timón, que lleve al país por mejor rumbo, sobre todo cuando comiencen a despedir a la gente y no haya más empleos, dijo ayer el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Yucatán, Michel Salum Francis.
Añadió que, hasta antes de marzo, el Producto Interno Bruto (PIB) del Estado crecía por arriba de la media nacional, con el 3.4 por ciento, pero debido a que la producción de bienes y servicios está detenida desde hace más de tres semanas, estudios recientes indican que habrá un decrecimiento en ese segmento de la economía, además de que no hay la posibilidad de medir el comportamiento del PIB si toda las actividades están detenidas, excepto las que permite el Gobierno Federal por la emergencia sanitaria contra el Covid-19.
Complicada
–La gente se va a dar cuenta de la realidad que se vive en el Estado como en todo el país, cuando vean que los empresarios no están tratando de sacar partido o algo para ellos, sino la manera de reactivar la economía de Yucatán, como se ha explicado de mil maneras, pero lamentablemente el Gobierno (Federal) no lo entiende o vislumbra de esa manera, dijo.
Explicó que los apoyos a microempresarios que ofrece actualmente el Gobierno del Estado son insuficientes para resolver el problema, sobre todo si la contingencia contra el Covid-19 se prolonga hasta el mes de agosto o septiembre, como se anunció ayer.
–Por consiguiente, la situación actual es muy complicada y no vamos a poder aguantar más de dos meses y si el problema no se resuelve antes, nuestro país tendrá serios problemas de crecimiento económico. El año pasado la economía del país en lugar de crecer bajó .01 por ciento, y ahora los expertos hablan de una caída de .05 por ciento o más.
Empresarios quebrados
Aseguró que los empresarios sólo podrán aguantar la situación actual no más de dos meses y, si el Presidente de la República se mantiene en la misma posición, el país tendrá serios problemas, sobre todo en materia económica, porque no habrá crecimiento, sino decrecimiento como el año pasado.
–Cuando la gente vea que no hay dónde trabajar porque las empresas van a estar en quiebra o endeudadas, como está ocurriendo en otros países y donde hay personas comiendo de lo que pueden conseguir en la basura, entonces van a entender el papel que juegan los empresarios en la economía nacional, manifestó.
Como ejemplo, dijo que los empresarios de Acapulco anunciaron que no van a pagar los servicios de energía eléctrica y de agua potable, y eso apenas es el inicio de un grave problema que podría culminar con un estallido social, aunque se espera no sea necesario llegar.
Como anillo al dedo
–Hasta el domingo pasado muchos teníamos la esperanza de que las autoridades pudieran recapacitar y dar nuevo rumbo al país, pero hoy no tratamos de ser alarmistas, pero sí hacerle ver la realidad por la que atraviesa el país; y eso que la pandemia del Covid-19 le vino como anillo al dedo, es verdad porque con eso podrá acabar con la iniciativa privada que representa el 98 por ciento de las actividades económicas del país, en su mayor parte integradas por micros y pequeñas empresas, resaltó Salum Francis.
Finalmente señaló que difícilmente el Gobierno Federal pueda crear dos millones de empleos en los próximos dos meses, de manera que millones de personas se van a quedar sin trabajo y empresarios sin empresas, sin dinero y con deudas.
(Víctor Lara Martínez)