VALLADOLID, Yucatán, 8 de abril.- En entrevista con el Sr. Miguel Tun Osorio, uno de los mayistas más conocidos de la ciudad, es conocedor de la lengua maya, al igual que de sus tradiciones y costumbres. En entrevista referente a la lengua maya, nos dijo lo siguiente:
“Ahora voy notando que mucha gente pierde el miedo a hablar maya, miedo o vergüenza, porque hubo una época en la que cuando le preguntabas a alguien en maya algo, no te contestaba. Esa es mi experiencia de hace unos 8 o 9 años, pues me he fijado que ya están hablando la maya, tal vez debido a la influencia de las escuelas con sus programas o asignaturas de lengua maya, y eso le hace pensar a la gente que no es vergonzoso hablar maya, sino al contrario.
»Pero lo que me extraña es que los vocablos antiguos que reemplazan al español, son muy pocos los que los usan, es muy sorprendente ver que los vocablos antiguos sobreviven en algunas partes de los alrededores de Valladolid; en los pueblos y comisarías, hay algunas expresiones que se emplean, que son usadas bien, pero otras no, sin embargo, las usan. Algunas palabras, a causa de falta de conocimiento, las cambian por español por la ligereza de contestar; por ejemplo, si le preguntan algo y no lo recuerda, responde incluyendo el español.
»Se necesita enseñarle a esta gente a hacer uso de la raíz verbal para inventar o crear una palabra, por ejemplo: ventilador, muchos dicen ‘pikit’, pero eso es algo como una hoja o un sombrero o cartón que se mueve, para ventilador se puede usar ‘uanik’, algo parado que da aire, eso se les puede enseñar.
»Otras cosas son los sufijos y prefijos, que pocos saben por qué se usan. Por ejemplo, el sufijo ‘ki’ ¿por qué se usa? Bueno, el vocablo ‘ki’ en maya se usa para advertir, es como una advertencia; se puede ver en la palabra ‘jojolki’, que está diciendo que está demasiado resbaloso, y hay muchas otras que usan un sufijo. Y los prefijos también se usan, por ejemplo, el mismo ‘ki’ en ‘kikiolne’ te está diciendo que seas feliz o muchas felicidades. Yo he notado que ahora para decir ‘felicidades’ te dicen ‘kima olaa’, pero lo correcto es ‘kikionel’.
»También he notado que ya se liberó un poco de la vergüenza, hablamos de las personas que viven en comunidades pequeñas, porque por ejemplo, antes si le hablabas a una muchacha de pueblito en maya, te contestaba en español, aunque cuatrapeado, pero ahora ya no. En el parque ya hablan en maya, en los cruceros, en las escarpas, en los comercios, están platicando en maya, ya no hay tanta vergüenza, y esto es un avance muy bueno.
»Ahora hay una estación de radio que tienen sus programas en maya aquí en Valladolid, esto ayuda mucho porque influye en estas mismas personas para que se suelten; además, las escuelas también apoyan mucho. Pero hay algo que siento que las personas, a veces de una extracción indígena, todavía mantienen ese estigma sobre su lengua; tengo la versión de una señora que sabe hablar maya y sus hijos también, pero ella les dice que no la hablen.
»Me alegra que por lo menos ahora se le dé atención a la lengua. Creo que la vergüenza de hablar maya nace porque cuando algunos la hablaban antes, los señores dzules se burlaban de ellos, los menospreciaba; pero hay gente en la actualidad que, por el contrario, los reconoce y les da su lugar. Luego he visto casos en los que dicen ‘caramba, es que a mí no me enseñó maya mi papá y lo sabía hablar, con mi mamá hablaban en maya, pero a mí no me enseñaron’.
»El maya siempre ha sido un idioma, nosotros tardamos en reconocer eso porque no habían los elementos que demostraran la cualidad y calidad de maya, y ahora nos damos cuenta que si los señores extranjeros se preocupan por aprenderlo y comunicarse con la gente que lo sabe, ¿por qué nosotros no?
»Esto ya es de hace muchos años, habían extranjeros que llegaban y sabían hablar maya, yo recuerdo un caso en 1956 o 1950, llegaban señores que eran extranjeros y se esforzaban por aprenderlo o venían a escuchar cómo hablábamos nosotros el maya aquí en Yucatán. Algunos quedaban decepcionados porque la gente trataba de hablar el español y no usaban el maya, pero ahora ya está cambiando esto, yo he tenido la oportunidad de platicar con catedráticos de Alemania, me han hecho el favor de darme su amistad y comunicarnos por medio de correo electrónico, y así podemos ver que hasta ellos se interesan.
»Y hay un ejemplo más, del señor Toshida, que también a través de Marco Antonio Chávez Díaz (que era locutor de la XEME) conseguí un correo de él, en donde preguntaba que por qué se usa el ‘nipol’an’ cuando no eso significa, y yo le contesté que tiene razón, no eso significa, sino ansiedad, para decir ‘tengo mucha hambre’; y ‘nipola neci hana’ para decir que se está muriendo, para decir ‘gracias’. Y así hay muchos vocablos, sólo es cuestión de aprenderlos y saber usarlos”.
(Manuel Vázquez Rivero)