Adrián dejó ayer su rutina para hacer lo que realmente le gusta: ver la televisión, jugar y comer su comida preferida.
Adrián sabe que se celebra el Día del Niño, pero por el coronavirus continuará en casa para no contagiarse de lo que él llama “el bichito malo”.
Su regalo sorpresa será jugar todo el día, podrá ver televisión el tiempo que quiera y comer su hamburguesa.
Su madre Teresa Rodríguez decidió hablarle sobre el Covid-19 y la importancia de lavarse las manos frecuentemente y no tocarse la cara.
Su rutina diaria consiste en levantarse a la misma hora, bañarse, desayunar, vestirse, estudiar con la teleeducación, descansar y jugar.
Con respecto la educación televisiva, Teresa señaló que el pequeño está muy atento a los contenidos; sin embargo, no los considera ideales para los niños con autismo, como es el caso de Adrián, porque son tantos los videos, que los pequeños pierden el interés.
Durante el confinamiento, Tere ha tenido problemas con su pequeño porque en ocasiones se descontrola, se frustra, molesta, avienta cosas, patea y brinca.
Ante esos casos, quizá le ayudaría utilizar la línea de Orientación y Apoyo Emocional implementada por el Gobierno del Estado.
(Melly Manzanero)