Activan protocolos para atención espiritual de enfermos

Jorge Martínez Ruz (*)

La emergencia sanitaria que vivimos a causa de la pandemia por Covid-19 ha incluido momentos de incertidumbre, dolor, sufrimiento y muerte. Es por eso que los obispos de México, a través de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), han dispuesto protocolos de acompañamiento espiritual durante la pandemia.

El Espi?ritu Santo no ha dejado de iluminar la manera de actuar de la Iglesia, pues han surgido mu?ltiples iniciativas para acercar a Dios a sus hijos, y que ellos se sientan tambie?n cercanos a Dios, a trave?s de los medios de comunicacio?n y de las nuevas tecnologi?as de informacio?n, la creacio?n de Redes Vecinales de Solidaridad en la Parroquias, la preocupacio?n para que la caridad cristiana siga siendo efectiva, eucaristi?as, cursos, catequesis, oraciones y Horas Santas “online”.

Muchos agentes de pastoral generosamente han manifestado de manera creativa que es preciso siempre hacer todo el bien posible, au?n cuando los li?mites de nuestra accio?n hoy se vean reducidos. ¡La caridad de Cristo nos apremia! (cf. 2Cor 5,14).

Las obras de misericordia, como visitar al enfermo y dar cristiana sepultura a los difuntos, son acciones que corresponden, en primer lugar al sacerdote como pastor propio de una comunidad, que es quien ha de ayudar diligentemente con caridad a los enfermos, especialmente a los moribundos, da?ndoles fortaleza, administra?ndoles los sacramentos y participando de modo particular en las preocupaciones, angustias y dolores de los fieles por el fallecimiento de sus seres queridos (c. 519, 529 &1-2).

Por ello y ante esta emergencia Covid-19, no debemos olvidar de forma muy concreta la atencio?n pastoral hacia: A) Los enfermos, sobre todo aquellos que esta?n en peligro de muerte.

B) Los me?dicos y todos lo que de algu?n modo tienen relacio?n con los enfermos, y esta?n luchando para aliviar el cuerpo de los que sufren; pero, ¿quie?nes los confortan a ellos con consuelos espirituales? Es fundamental generar para todos los trabajadores de la salud y para todos los fieles relacionados con este oficio, una li?nea telefo?nica o reuniones virtuales para apoyarlos en sus dudas e?ticas, morales y espirituales ante dicho acontecimiento.

C) Tampoco podemos dejar de lado a los difuntos, pues es una obra de misericordia que reclama nuestra presencia, porque es muy importante para nuestros fieles.

Ante la actual emergencia sanitaria, nuestra accio?n pastoral ante los enfermos, difuntos y sus familias no debe cesar, pero tambie?n debe ajustarse a los lineamientos sanitarios internacionales, nacionales y estatales, tal como ha sido expresado en el Plan emergente sacerdotal de la CEM. Ante esta situacio?n de pandemia: ¿co?mo acercarnos a los enfermos graves, sobre todo a los infectados con el coronavirus, y a las familias que sufren?

La CEM ha dispuesto protocolos, que en cada diócesis se deben implementar. Estos abarcan los siguientes puntos: Asistencia espiritual y administración de los sacramentos a enfermos graves (sin Covid-19); sacerdotes designados capellanes para administrar la Unción de los Enfermos a personas con Covid-19 y elaboración de protocolos para esta atención; facilidad para ofrecer intenciones en misas, sobre todo para pacientes o difuntos a causa del Covid-19, así como también las recomendaciones para atender los casos de fallecimiento durante la emergencia sanitaria.

En el caso de la Arquidiócesis de Yucatán, estos protocolos se han activado desde el inicio de la cuarentena, y se han ido adaptando según las directrices que va brindando la Conferencia del Episcopado Mexicano. De manera especial, la Pastoral de la Salud de la Arquidiócesis ha ido coordinando estos esfuerzos, con ayuda de varios benefactores que han colaborado para adquirir la vestimenta y utensilios necesarios para que los sacerdotes puedan organizarse y atender a los enfermos de los hospitales.

Si algún fiel de la arquidiócesis necesitara alguno de estos servicios, sea la atención a enfermos, las exequias para algún difunto o solicitar intenciones para las misas (que se celebran a puerta cerrada), favor de dirigirse a los teléfonos dispuestos por cada parroquia, así como también a través de los portales de Facebook para las parroquias que cuentan con ellos, o directamente al Facebook: “Arquidiócesis de Yucatán” donde también damos orientaciones sobre los servicios que requieran.

Es importante quedarnos en casa y colaborar todos juntos para salir delante de esta contingencia, manteniendo la esperanza de que Dios nos sigue acompañando a través de su Iglesia.

(*) Coordinador de la Pastoral de Comunicación de la Arquidiócesis de Yucatán.