El campo yucateco pasa por su peor momento con el paso de la tormenta tropical "Cristóbal" y los agricultores ven con incertidumbre y miedo comenzar de cero, ya que lo han perdido todo y necesitan la implantación de un programa emergente de rescate al campo, pues sin este apoyo muchos dejarán la agricultura por falta de recursos.
Esta tarde acompañamos a Don Mario Pech Martin y sus dos hijos a su parcela en la unidad Yaax Che Camino 2, donde tenían sembrado calabaza y papaya Maradol, aquí pudimos constatar un triste panorama debido a que el cien por ciento de los campesinos lo perdieron todo.
La primera planta que visitamos fue de calabaza donde don Mario tenía sembrado media hectárea y nos platicaba que después del paso de las lluvias cuando pudo visitar su planta desde que vio la entrada del camino sintió tristeza, porque el agua alcanzó más de medio metro de altura dentro de su planta y el camino hasta el día de hoy se mantiene anegado.
“Aquí teníamos papaya, pero cuando ya estaba por terminar le sembramos calabaza; estábamos por empezar a cosechar cuando vinieron las lluvias y no no pudimos recuperar nada, ya que todo quedó bajo el agua, hoy como puedes ver solo están las guías secas, es muy triste”, expresó don Mario.
Luego visitamos la zona de cosecha de papaya Maradol, donde tenía sembrado media hectárea de papaya nueva de unos dos meses y más atrás una hectárea de papaya ya en producción “apenas la habíamos empezado a cosechar cuando todo se inundó”, indicaron.
Hoy, a tres semanas del paso de la tormenta el panorama es muy triste y se pueden observar las afectaciones, no hay ninguna planta de papaya en pie, todo está en el suelo, por lo que el patrimonio, esfuerzos y sueños, todo se ha perdido.
En la plática con don Mario nos mencionó que solo está esperando que se seque bien el terreno para volver a sembrar calabaza y sobre la papaya va ser muy difícil volver a levantar una nueva cosecha por cuenta propia, pues necesitan la inversión que ya no tienen, además dijo que en sus años de trabajar estas tierras jamás había visto que estos terrenos se inundaran que fue algo que no se esperaban.
Esta situación la están viviendo cientos de agricultores de la localidad y de todo el estado, quienes ven con incertidumbre volver a empezar, porque es muy difícil levantar una cosecha que se que además de trabajo requiere esfuerzos e inversión que no tienen ahora.
Dada la situación actual urge que las autoridades de los tres niveles de gobierno elaboren un plan emergente para rescatar la agricultura porque sin apoyo muchos ya no podrán sembrar y trabajar la tierra.
Por su parte los agricultores piden la intervención de gobierno federal y estatal para apoyar el campo que hoy por hoy atraviesa su peor momento en su historia.
Por Pastor Palma
Por Redacción Digital Por Esto!