Cuando apenas faltan diez días para el inicio de la temporada de captura de pulpo en el estado de Yucatán, una de las pesquerías más esperadas por el sector pesquero, empresarios y pescadores de los puertos de Yucalpetén permanecen sin movimiento y con poca esperanza ante los golpes que les ha ocasionado la pandemia del COVID-19.
Anselmo Canul López y José Azueta Acosta, el primero presidente de la Sociedad Cooperativa Mero –Coronado y el segundo armador de lanchas de ribera de este puerto, dieron a conocer durante entrevista vespertina que está muy incierto el futuro de esta pesquería debido a los efectos de la pandemia que está afectando a todo el mundo.
El problema de salud que atravesamos en la actualidad ha ocasionado el cierre de los mercados internacionales y aqueja a este sector, tomando en cuenta que los mercados para el molusco son el europeo y el asiático y Yucatán es uno de los estados que más producción de pulpo ofrece al mercado extranjero.
Desde luego el problema también afectará al mercado nacional ya que se envía pulpo al mercado de La Viga en la Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, donde actualmente también hay problemas debido a que con la crisis económica la gente no cuenta con recursos financieros.
El año pasado haciendo referencia del (2019) para esta fecha las jimbas ya habían llegado, las embarcaciones preparaban sus alijos, sus cordeles, plomos y se veía que había entusiasmo ante la llegada de la pesquería más importante para todos los yucatecos.
El circulante ya había comenzado a fluir, los hombres de mar esperando que llegue el uno de agosto fecha en que inicia la temporada de captura de pulpo.
A diferencia de este 2020, cuando la pandemia continúa flagelando a la humanidad, el pescador se hace a la mar debido a que esta es su actividad, es lo que sabe hacer y no importa lo que traiga ya que con esto podrá obtener los alimentos para su familia.
Los pescadores ahora están dedicados a la pesca de lo que salga, bien puede ser sardina o algo de redes mero, pargos, lo que se pueda; debido a que estamos en el verano la mejor estación del año para consumo de pescados y especies del mar.
El movimiento para la pesca de pulpo hasta este martes es nulo, los barcos de mediana altura continúan avituallándose para la pesca del mero cuyos precios son bajos, algunos van por las langosta y otras embarcaciones simplemente se han amarrado a los muelles de Yucalpetén en espera que el panorama sea más alentador para las próximas fechas.
Emilio Pech Cobá, veterano patrón de costa y armador, dio a conocer que para sacar una embarcación de mediana altura para la primera jornada de captura de pulpo requiere de cuando menos 250 mil pesos para su avituallamiento y desde luego los anticipos a los pescadores que estarán en altamar por 15 a 20 días.
"Los veteranos patrones de costa sabemos cómo inician las temporadas de las pesquerías lo que sí es un hecho es que la captura del pulpo es la pesquería más esperada en toda la costa yucateca".
Para esta pesquería se requieren de cuando menos una docena de alijos, con sus respectivos pescadores más el cocinero y el patrón, que son los que se hacen cargo de la embarcación nodriza entre éstas la máquina y darle de comer a los tripulantes que desayunan almuerzan y cenan todos los días en el período que dura la jornada pesquera.
Al hablar de anticipos, mencionó que en este año de pandemia será difícil definir cuánto se les otorgará a los hombres de mar porque en realidad la situación de la pesquería del molusco es algo que para los que vivimos de la pesca es incierta por los compradores del molusco.
De la captura del pulpo, cuya fecha oficial inicia este uno de agosto y concluye el 15 de diciembre, salen los gastos de fin de año debido a que en el caso del hombre de mar no tiene aguinaldo y lo que hacemos es tener el guardadito para las celebraciones decembrinas, afirmó Pech Cobá.
La pesca del pulpo activa la economía del sector pesquero, porque con el hecho de salir a la mar comienza la demanda de hielo, diesel, tortilla, pan francés, productos cárnicos, aves, agua para beber a bordo, para lavar el producto a bordo, bolsas para proteger el molusco del hielo para la nevada, anzuelos, plomos, cordeles entre otros utensilios para la pesca del octópodo, generando una gran derrama en otros sectores que dependen también de esta fecha.
Sin embargo la realidad es que la situación económica para el sector pesquero no es la esperada por los citados cierres de los mercados internacionales, que son los inyectores de circulante al sector pesquero.
Por Julio Jiménez Mendoza