El presidente estatal de la Canacintra, Alberto José Abraham Xacur, dijo que, por fortuna, en el caso de Yucatán mucha de la industria está ligada al sector de alimentos que es considerado esencial y pudo seguir trabajando en esta pandemia de COVID-19, pero aún así el impacto ha sido severo y está lejano ver índices de recuperación porque las ventas cayeron hasta en un 50 por ciento, así como se espera que pudiera haber cierres definitivos en por lo menos 10 por ciento de las empresas.
“Por fortuna, en el caso de Yucatán, mucho del sector industrial está ligado a la producción de alimentos que es una labor esencial y una buena parte no cerró, siguió trabajando, aunque desde luego con las restricciones y demás medidas que se han tomado”, expuso.
Sin embargo, dijo que las ventas no son como se tenían antes de la pandemia y la industria de este sector de alimentos está vendiendo el 50 ó 70 por ciento de lo que antes hacía.
En este sentido, el líder en Yucatán de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación dijo que el sector de exportación estuvo cerrado más de 2 meses, así como la industria relacionada con las autopartes y la aeronáutica, que han ido registrando cierta recuperación, pero todavía no se puede apreciar porque tarda algún tiempo en empezar con las ventas.
“Estas empresas sobrevivieron a base de créditos, así como también se vio afectada la industria de la construcción que estuvo parada hasta el pasado 1 de junio”, comentó.
En cuanto a cierres de negocios, dijo que hasta ahora no se han dado reportes concretos en este sentido, pero muchos empresarios han dado a conocer que pasan apuros en este sentido, tanto así que se estima que pudiera cerrar el 10 por ciento de la industria debido a la pandemia y sus efectos económicos.
Desempleo
En cuanto al empleo, dijo que si bien no hay índices claros de recuperación y esto tardará, tal vez hasta el 2021, incluso el 2022, sí se logró frenar el desempleo gracias a la reactivación económica a partir de mes de junio.
En este tenor, expuso que en mayo el número de trabajadores afiliados al IMSS era de 365 mil 817 y al cierre de junio es de 365 mil 288. Dijo que lo anterior constituye haber logrado cierta estabilidad, pero la cifra está por debajo de las 288 mil 658 personas que estaban dadas de alta en el Seguro Social en noviembre del año pasado, antes de la pandemia.
“Hay un freno en la caída del empleo, eso es real, y esto indica que hay ya un inicio de recuperación, porque el número de empleos que se perdieron en abril fue de 13 mil 69 y en mayo de 7 mil 230, pero en junio se mantienen los empleos más o menos estables con respecto al mes anterior”, dijo.
Abraham Xacur destacó también que hubo un impacto muy fuerte para las empresas porque muchos trabajadores, al estar dentro de rango de vulnerabilidad, no pudieron continuar trabajando y hoy, luego del inicio de la reactivación, las industrias están trabajando con el 70 ó 75 por ciento del personal.
Esfuerzo
El líder empresarial dijo también que se ha tenido que hacer un esfuerzo importante para implementar las medidas y los protocolos sanitarios dictados por las autoridades, los cuales representan un aumento como del 10 por ciento en los costos de producción.
Sin embargo, dijo que, por fortuna, en este caso es inversión, por ejemplo, en infraestructura que se hace una sola vez y una vez hecho ya aminora ese gasto, aunque se continúa con un gasto menor en insumos como gel antibacterial, termómetros, cubrebocas, etc.
En general, dijo que las medidas tomadas, las cuales tienen que ver con temas de infraestructura, como en el caso de las maquiladoras que se colocaron mamparas entre los trabajadores, además de medidas preventivas en el personal, como la desinfección, los filtros de acceso, etc., pueden impactar en un 5 por ciento el costo de producción, pero reiteró que en muchos casos son gastos que se hacen una sola vez.
Incertidumbre
En cuanto a la recuperación, consideró que no se verá este año y se alargaría al 2021 e incluso al 2022, también debido a que el mercado donde se mueven los productos locales son Quintana Roo y los destinos turísticos que ahora están parados por completo.
“Hoy el panorama es de incertidumbre y la esperanza que tenemos es que se encuentre una vacuna o al menos una cura efectiva, pero eso no sabemos cuándo va suceder y, aunque eso suceda, hay que esperar el proceso de recuperación económica de la población y del turismo que empiece a viajar y eso va a tardar algún tiempo”, dijo.
Por David Rico