Cerca de dos millones de pesos es el presupuesto que el Ayuntamiento designa para el mantenimiento de los 38 panteones de Mérida, un gasto que a simple vista no se ve, debido a que los trabajadores señalan que los cementerios General y Xoclán carecen de mantenimiento, que se ve en la abundante maleza y tumbas abandonadas.
Los empleados públicos comentaron que no hay personal suficiente para abastecer toda la zona y no cuentan con las herramientas necesarias.
POR ESTO!, visitó ambos camposantos para registrar los desperfectos del lugar y conocer la molestia de los encargados de limpieza.
En el anonimato indicaron que “son muchos pasillos que hay que limpiar y no nos damos abasto. Se tiene un presupuesto cada año y nosotros estamos en las mismas, no invierten lo suficiente”.
“Incluso hay sectores en donde la maleza rebasa las tumbas, que se pierden por tanto arbusto. Tratamos de mantener limpio los andadores, sin embargo, el lugar es muy grande y somos pocos”.
En el Cementerio General comentan que al lugar le hace falta mucha atención y mantenimiento por parte de las autoridades municipales, pues hay tumbas, lápidas y mausoleos destruidos o cubiertos de hierba. Además, se pueden ver las estructuras quebrantadas y en mal estado. El tema de espacios es grave en este lugar porque ya no tiene para donde crecer.
El Cementerio de Xoclán se observan mejores “condiciones”, aparentemente; sin embargo, en los pasillos de atrás también tienen el problema de hierba y desperfectos en las criptas.
En información recabada, hasta el último corte las autoridades contabilizaron 25 mil 751 tumbas en el Cementerio General y 35 mil en Xoclán, ambos públicos. Mientras que los privados llegan a 4 mil 327 en el Panteón Florido, 2 mil 054 en Jardines de la Paz y 560 en el Cementerio de Chuburná. En comisarías se estipula que hay de 20 a 30 lugares.
En el primer camposanto mencionado se calcula un 80% de tumbas olvidadas y en el segundo un 20% datos proporcionados por el personal. Entre estos dos sitios son más de 60 mil bóvedas.
Atendiendo al tema de tumbas abandonadas y poco espacio, a principios del 2020 se hicieron modificaciones en el reglamento de panteones públicos, poniendo una cuota a los titulares que los obliga a conservar limpio los pasillos y mausoleos, con el objetivo de no olvidar sus espacios.
La regidora Ana Gabriela Aguilar Ruiz (PRI) dijo que “es un tema que hemos tratado para que la gente se haga responsable de sus respectivas tumbas. Sin embargo, esto se ha complicado por la emergencia sanitaria causada por el COVID-19, pero el objetivo es tener espacios dignos y pasillos limpios en los panteones”.
La modificación indica que “los titulares con derecho a perpetuidad tendrán que ir a servicios públicos para registrar a sus beneficiarios, al momento de fallecer deberán refrendar el derecho de uso cada tres años, serán seis UMAS equivalentes actualmente a 534.12 pesos aproximadamente”.
Para las nuevas personas que compran el derecho quedó de la siguiente manera: “ellos tendrán que pagar cada tres años su refrendo que es de 30 UMAS, en la actualidad serían cerca de 2 mil 670.06 pesos, pero a partir de su cuarto pago solo tendrán que dar lo equivalente a seis UMAS”.
En ambos casos los usuarios tendrán que cumplir con las siguientes reglas: tener limpia el área de basura y maleza, dar el mantenimiento adecuado a sus tumbas, entre otras cosas. Esto con la finalidad de generar visitas constantes y acabar con el problema de abandono. Cualquier tipo de construcción la gente tendrá que sacar un permiso.
“En caso de que las personas no cumplan con los requisitos se realizará el proceso de revocación. Si descuidan su lugar tirando basura, escombro, no piden permiso para construir, entre otras cosas, las autoridades tendrán el derecho de buscar al titular para una explicación”
Estas decisiones se dieron porque en la actualidad existen tumbas muy deterioradas y deplorables en los camposantos públicos.
Los encargados dijeron que el panteón está cerrado para visitas, pero la gente que desee dar mantenimiento a sus mausoleos tiene el acceso permitido.
En cuanto al poco espacio la funcionaria pública explicó que “ese detalle lo tiene el Cementerio General, se ha platicado con las autoridades en tener un área mixta que implica poner las tumbas de manera horizontal, vertical y restos áridos de cenizas, pues este lugar ya no tiene para donde crecer, así que habrá que esperar la respuesta de los responsables”.
La regidora Alejandrina León compartió que “tengo entendido que ya se empezaron a encargarse de las tumbas abandonadas, porque es un problema serio al que ya se le tiene que buscar una solución”.
“Hay mausoleos que están en ruinas y eso no le da buen aspecto al lugar, lo ideal es que todo esté en orden y limpio. El Cementerio General si está más descuidado y merece más atención, mientras que Xoclán tiene ese tipo de detalles, pero es menor”.
“Las autoridades se han encargado de localizar a los titulares y de no aparecer tendrán que buscar la solución para que el espacio no quede inhabilitado”.
El tema de robos es otro problema para el General, ya que la gente entra a vandalizar y a robar la herrería de las lápidas. El ayuntamiento tendrá que atender estos desperfectos para que el lugar sea más digno para las familias de los difuntos.