El Ayuntamiento de Mérida sentenció que el Paso Deprimido continuará clausurado y que no hay para cuándo se abra a la circulación. Aunque ya luce seco, luego de más de 160 días de estar inundado, se colocaron mantas en las que se anuncia a la población que la vía continuará cerrada al tránsito vehicular, mientras siguen buscando “propuestas” para resolver el problema.
Informamos que luego de varios meses por fin la vía luce sin agua acumulada, pero aun así no hay proyecto para la reparación y abrirlo al tránsito, por lo que continúan los embotellamientos y afectaciones a la vialidad.
La autoridad municipal colocó mantas en el puente que cruza por encima del paso a desnivel en las que se sentencia a la ciudadanía que “Por tu seguridad esta vialidad permanecerá cerrada”, además de que se expone:
“Junto con especialistas buscamos las propuestas para darle una solución definitiva en beneficio de todos los ciudadanos”.
A más de 5 meses el Ayuntamiento de Mérida no ha podido definir un proyecto de intervención y solución del problema. Según esto, los especialistas siguen buscando opciones. En particular, esta tarea se le ha delegado al Colegio de Ingenieros Civiles de Yucatán.
Sin embargo, el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Sureste, David Carrillo Tec, consideró que no hay mucho que buscarle, que la opción más viable es la de rellenar una parte del paso deprimido y subir el nivel de la superficie de rodamiento alrededor de metro y medio.
Dijo que actualmente la altura del túnel tiene alrededor de 4 metros 40 centímetros, y podría rellenarse y dejarse en unos 2.90 o 3 metros, como está en los pasos de Anikabil en Caucel con Periférico y en la entrada de Santa Gertrudis Copó.
“Con esto sólo podría pasar vehículos ligeros y camionetas más no así el transporte de carga ni transporte público pesados, tendría que hacerlo éstos por las laterales”, comentó.
Señaló que esta es la opción más viable y que a la larga resultaría más redituable, en vez de sólo reparar los desperfectos y continuar gastando grandes cantidades en el mantenimiento o de plano taparlo.
“Con la alternativa de rellenar un tanto disminuiría en gran parte la cantidad y tiempo de las bombas que se tienen. Hay que tener en cuenta que hoy el lugar luce seco en la superficie, pero continúa el agua debajo de la superficie de rodamiento y porque las bombas se mantienen trabajando las 24 horas, pero si dejan de funcionar el lugar se vuelve a llenar”, expuso.
Agregó que, rellenando una parte, el aumento del nivel del agua en el manto freático dejaría de ser un problema y si bien podría haber bombas funcionando, serían menos y el costo de mantenimiento sería menor, porque ahora las bombas trabajan todo el día.
“No sería viable hacer sólo reparaciones, romper, reparar fisuras y gastar mucho, y luego con las lluvias que se vuelva a inundar y que se siga gastando mucho dinero con bombas trabajando siempre. Tampoco es viable que se rellene por completo, lo mejor es subir el nivel”, reiteró.
Además, dijo que por indicaciones de la Secretaría de Seguridad Pública no es viable tapar el Paso Deprimido pues es útil en términos de vialidad y para el flujo de los autos y por ello no es recomendable cerrarla.