En un ambiente de algarabía y ferviente devoción, los lugareños participaron en la tradicional Danza del Pavo, efectuada como parte de los festejos religiosos en honor a Santa Cecilia, patrona universal de los músicos.
La cúspide de las celebraciones en honor a la venerada, llegó la noche del domingo con la peculiar actividad de mosaico cultural y de tradición que convocó a decenas de lugareños de todas las edades que con alegría se unieron a la peregrinación por las calles.
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Para este 2021 y tras dividirse la comitiva encargada de organizar los festejos anualmente, se efectuaron dos danzas del pavo; una a cargo de la familia Montejo Peraza que cumplió 16 años de tradición y otra realizada por la familia de Jesús Itzá Chán, que lo celebra por segundo año.
Con ello, la noche del domingo los dos gremios católicos en honor a Santa Cecilia, salieron del predio de cada familia anfitriona para recoger la promesa (pavo) y posteriormente, dirigirse a la iglesia de la Purísima Concepción, para presentarlo y participar en la misa.
Al término, cada comitiva efectuó el rezo de un rosario, como antesala al peculiar recorrido por las calles, al compás de 6/8 que consiste en pequeños y cortos brincos que emulan el caminar y el comportamiento del pavo antes del apareamiento.
La comitiva de la familia Itzá Chán fue la primera en emprender el derrotero con rumbo a su predio; al ritmo de la distintiva melodía musical, los lugareños se abrieron paso por las calles, encabezado por el aposento del “guajolote” que representa la promesa.
A los pocos minutos, le siguió la promesa de la familia Montejo Peraza, a cargo de Florencia Peraza Chan, que da continuidad al signo de fe y gratitud iniciada por el músico invidente Lucio Guillermo Montejo Peraza, quien falleció en el 2020.
A diferencia del primero, el segundo contingente hizo escala en cada esquina para ejecutar alegres estampas jaraneras, mientras los lugareños se turnaban para cargar el aposento de los dos pavos que reafirman la promesa de la agrupación.
Esa noche, cada familia realizó el rezo correspondiente al novenario. Como es tradición, las dos comitivas ejecutaron varias piezas jaraneras a la entrada de la iglesia antes de iniciar con la alegre peregrinación. El sonido de los voladores por los diferentes puntos de la población, enmarcaron de alegría la celebración.
La mañana de ayer lunes, se celebró la misa por el onomástico de la Patrona de los Músicos, que marcó la entrada del gremio a cada hogar anfitrión. Con ello, culminan los novenarios con motivo de los festejos a la venerada, llevados a cabo del 13 al 22 de noviembre.
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