Yucatán: Salineras de San Crisanto se encuentran descuidadas, aseguran pobladores

Al paso de los días las salineras del puerto de San Crisanto comienzan a quedarse sin agua, esto por la falta de lluvia y de la fuerza de las corrientes que desembocan del cenote y del mar. Sin embargo; pobladores de la comisaría aseveran que también la falta de mantenimiento ha sido un factor que ha afectado las charcas al pasar de los años.

Alicia Palma, pobladora del centro de la localidad, afirma que en años atrás era muy raro ver que las salineras se quedaran sin agua, puesto que los que trabajaban en la extracción de la sal siempre le daban mantenimiento constante y lo rellenaban con agua de mar.

“Antes las charcas estaban llenas, rebosaban cuando había bastante lluvia, hace meses bonitas que estaban. Pero desde que comenzó el Frente Frío, las comenzó a secar, además que le dejaron de dar mantenimiento y eso también fue lo que afecta a las salineras”, comentó Alicia.

El tener que dar constante mantenimiento de las rías, es bastante complicado, puesto que se necesita mover con una herramienta como el jalador para que no se quede pegado y duro el suelo. En años atrás, los pobladores comentan que la extracción de sal era una de las principales fuentes de trabajo en el puerto. Decenas de hombres y mujeres trabajaban antes del amanecer para que no les quemara el Sol junto con la sal que se extraía.

Palma, asevera que años atrás eran cuatro meses de trabajo que les dejaba el sacar la sal, desde los meses de marzo a junio cuando ya estaba preparado y bien movido todas las salineras, se vendían por toneladas y se pagaba bien en ese entonces. “Cuando acababa la temporada de la sal, se tenía que volver a darle otro mantenimiento para que pueda producirse de nueva cuenta para la siguiente temporada, quienes lo trabajaban se turnaban para mover el fondo diferentes días porque si es bastante complicado”, dijo.

Al pasar de los años, las personas comenzaron a dedicarse a la pesca y fueron abandonando el trabajo que por años era uno de los más fuertes de la comisaría y fuente de empleo constante.

Hoy en día Alicia y Angela Pech comentan que el abandono ha hecho que parezca ciénega el lugar, ya que no hay mantenimiento y se ha abandonado casi en su totalidad. “Ahora que ha comenzado a escasear la pesca, estaría bonito que se comenzara a trabajar de nueva cuenta como en los años de abundante producción de la sal, habría mucho empleo aquí en el puerto”, comentó Alicia.

Últimamente las vecinas comentan que lo poco de sal que se sacaba era pagado en 100 pesos la tarima. La última vez que se limpiaron y se movieron las salineras, fue hace nueve años, afirmó Angela Pech.

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CC