Yucatán

Progreseños y visitantes no respetan el cierre del Malecón Tradicional en Progreso

Algunos jóvenes incluso saltaron las cintas de seguridad para ingresar a la zona restringida
Pese a la presencia de visitantes los restaurantes registraron ventas bajas / Jesús López

En una muestra de reto a las autoridades y al mismo coronavirus, familias locales e internacionales abarrotaron ayer domingo el Malecón Tradicional y a falta del barandal para sentarse, varios visitantes tomaron el sol desde la banqueta; algunos jóvenes incluso violaron las cintas de seguridad y estuvieron caminando sobre zona restringida.

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Desde la mañana comenzaron a llegar decenas de bañistas, la mayoría optaba por dejar su vehículo a espaldas de la Prolongación “Romeo Frías Bobadilla” y caminar para disfrutar la temperatura y algún platillo de la gama de restaurantes.

La sana distancia poco a poco fue perdiéndose, la venta de alcohol causó que varios asistentes se olvidaran del cubrebocas para sentarse en la banqueta y pasar el rato; en esta ocasión no hubo distinción de edades, pues a diferencia del domingo pasado, esta vez se vieron adultos mayores y niños en toda la zona, sin ningún protocolo de higiene.

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La “banqueta de los borrachitos” ubicada al final del malecón, junto a una tienda de conocida cadena nacional, esta vez se vio repleta por conocidos pescadoresque a manera de juego anunciaban una riña tal como ocurría a menudo en este punto; los dos elementos de la Policía Ecológica que siempre custodiaban ahí, brillaron por su ausencia.

“Venimos para festejar a nuestros papás, pero así como venimos nos iremos, queríamos una fotografía junto a la playa, pero la vemos muy llena, es una lástima porque somos nosotros quienes propician que no se abra el malecón”, alegó Karla Palomo Roche, quien desde la ciudad de Mérida acudió en busca de un rato de sano esparcimiento.

Los restaurantes por su parte, registraron ventas bajas, fueron muy pocos los que tuvieron notable asistencia, uno de esos casos fue el de “Crabster”, que incluso dejó a sus comensales esperando afuera sin uso de ningún protocolo de higiene.

Los famosos “viene-viene” fueron probablemente de los pocos que obtuvieron generosas ganancias, pues varios turistas se quejaron de que se les cobraba una “cuota”, nada barata de hasta 40 pesos por un “servicio de vigilancia de todo el día”, cuando se quiso entrevistar a un par de estos trabajadores callejeros, se negaron a hacer declaración alguna.

Operativo mañanero

El lleno vespertino se dio a pesar de que por la mañana, Protección Civil Yucatán, la SSP Estatal y Municipal, despegaron un amplio operativo se realizó con la finalidad de evitar aglomeración en las playas que rodean al puerto; el saldo fue blanco pues no se registraron detenidos.

Esta estrategia se llevó a cabo por medio de unidades y elementos que a pie estuvieron monitoreando cada punto turístico.

Cabe señalar que el miércoles por la noche se cumple el lapso de restricción y acceso vehicular en el Malecón del puerto, por lo que se espera que las entradas totales registradas semanas atrás, vuelvan a repetirse.

SY