Más de 50 jóvenes se reunieron ayer desde las 15:00 horas en la calle 14 con 21 de Umán, para participar en una manifestación pacífica. La finalidad fue pedir justicia por el feminicidio de María May Che, originaria del fraccionamiento Itzincab.
La joven, de 20 años de edad, desapareció el 8 de abril después de salir de su trabajo y una semana después, el 16 de abril, fue hallado su cuerpo en estado de descomposición en el parque La joya, en Paseos de Opichen de Mérida.
La marcha fue encabezada por integrantes del Colectivo Feminista Humanitario, que ayuda a grupos vulnerables como mujeres, niños, adultos mayores y animales. Llegaron hasta las puertas del Palacio Municipal de Umán, donde hicieron un llamado a las autoridades para que la delincuencia, sobre todo la violencia hacia la mujer, no continúe.
“No permitiremos ninguna injusticia más, queremos que la violencia contra la mujer termine, ningún feminicidio más, hoy por María y mañana por todas nosotras”.
“Queremos que las autoridades nos cuiden y defiendan, que tengamos la confianza de salir de nuestras casas sabiendo que vamos a regresar sanas y salvas. Que nuestros padres, amigos y familia estén tranquilos, basta de sentir miedo y basta con la inseguridad”, comentó Edith Cisneros presidenta del Colectivo.
Entre las que encabezaban la marcha se encontraba Edith May Che, hermana menor de la ahora fallecida. Amigas de infancia, vecinas y mujeres que quieren apoyar la causa recorrieron las principales vías de Umán, caminaron más de dos kilómetros y se instalaron en la plaza principal, frente al Palacio Municipal.
El cuerpo de la ahora occisa permanece en la morgue del Servicio Médico Forense, ya que con las pruebas de ADN se tratará de determinar si Carlos Xool, pareja sentimental de la joven, o José Canche, un compañero de trabajo sería el culpable del asesinato.
Según datos proporcionados por la hermana de María, las autoridades quieren dar carpetazo al asunto, por lo que un abogado de confianza de la familia lleva el caso para que no quede impune el crimen.
Edith May Che, de 17 años de edad, es quien hace frente a la situación, ya que la familia está devastada. “Estamos aquí, no sólo por mi hermana, sino por todas las mujeres que han muerto a manos de la delincuencia”.
“El dolor que siente una familia al perder a un ser querido no se le desea a nadie, dentro de tres o cuatro días estarán los resultados de las pruebas de ADN y esperemos que caiga todo el peso de la ley al culpable, no queremos dinero, ni estamos pidiendo nada más que justicia”, finalizó.
Seguimiento de la FGE
A su vez, la Fiscalía General del Estado informó que da seguimiento a la investigación relacionada con el deceso de la joven, cuyo cadáver fue hallado la noche del viernes 16 pasado, en un parque del fraccionamiento Paseos de Opichén, en el Norponiente de Mérida.
Según la dependencia, desde el reporte de su localización se tomó conocimiento y se abrió la carpeta 50/2021, que continúa en fase de integración. Se han hecho diversas pruebas científicas y diligencias que permitan la recopilación de indicios del caso.
La familia de la ahora occisa acudió a la sede de la dependencia para la identificación del cuerpo, desde entonces la Fiscalía le ha ofrecido apoyo psicológico y asesoría jurídica, como parte del acompañamiento institucional.
SY