En Mérida, hay al menos 100 predios que presentan serios deterioros en su estructura lo que los pone en riesgo de un desplome durante la temporada de lluvias que inició el 15 de mayo pasado, de acuerdo con datos de la Dirección de Protección Civil Municipal.
En los últimos tres años, en 25 inmuebles se han registrado desprendimientos, por lo cual las autoridades municipales en su momento aseguraron los predios, esto con la finalidad de evitar accidentes con los peatones.
En lo que va del año, cuatro propiedades han registrado desprendimientos de cornisas, marquesinas y otra parte del inmueble, por fortuna sin heridos.
El más reciente tuvo lugar en una casona que tiene más de 50 años abandonada, ubicada en la calle 71 con 52, del centro de Mérida.
Cristian Chan Estrella, Director de Protección Civil Municipal, indicó que tiene un censo de inmuebles que presentan serios deterioros en su estructura por falta de mantenimiento y el paso de los años.
Alrededor del 70 por ciento de las propiedades se encuentran en el primer y segundo cuadro de la ciudad. Explicó que al momento tiene 102 predios que presentan daños, los cuales se pudieron verificar por medio de reportes ciudadanos o durante los recorridos físicos de los empleados de la dependencia.
En algunos de ellos, dijo que se han registrado desprendimientos, lo que ocasiona peligro para los transeúntes.
En los últimos meses se han registrado desprendimientos en inmuebles ubicados en la calle 62 con 65, 61 con 66, 52 con 55 y en la 63 con 72, en el edificio de la antigüa Sidra Pino. “Esos lugares se encuentran asegurados para evitar accidentes”, explicó.
Por su parte el Ingeniero Civil, David Carrillo, indicó que los inmuebles, al tener problemas en su estructura, con las lluvias se incrementa el riesgo de que se registre algún tipo de incidente como desprendimiento o desplome.
Explicó que “en algunos casos los propios dueños de los inmuebles aceleran el proceso de deterioro debido a que obstruyen los desagües lo que ocasiona que el agua acumulada se filtre en la estructura y esta se reblandezca”.
Agregó que lo anterior se debe a que, en muchos de los casos para remozar una vivienda en el primer cuadro de la ciudad, resulta complicado debido a que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tiene que emitir un dictamen y luego un permiso para poder realizar trabajos lo que suele ser costoso y demora mucho tiempo.
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GH