En el primer semestre del año se registraron en Yucatán 358 casos de Diabetes Mellitus Tipo 2, colocando al estado en el décimo lugar nacional en este rubro, de una de las enfermedades que más prevalencia tiene en el estado y que se hace difícil de atender porque además de un componente de salud está asociado a un componente cultural, como es la alimentación, consideró el Dr. Manuel Díaz Suárez, presidente de la Comisión de Salud en el Congreso Estatal.
De acuerdo con el Informe del Segundo Trimestre de la Secretaría de Salud Federal en cuanto a Diabetes Mellitus Tipo 2 en todo el país se registraron nueve mil 636 casos, siendo Tabasco, Jalisco y Querétaro los que más tienen, con mil 568, 619 y 608, respectivamente. Yucatán aparece en la décima posición con 358.
Además, el Sistema de Información de Enfermedades Crónicas (SIC) señala que en el estado viven 13 mil 504 pacientes con Diabetes, de los cuales 10 mil 176 son mujeres (75.4 por ciento) y 3 mil 320 son hombres (24.6 por ciento).
Díaz Suárez expuso que es un problema de salud importante que genera muchas muertes, pero a menudo no se habla del tema.
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“En esta labor que hacemos desde hace años, con ferias de salud y atención a la gente en municipios, hemos visto que hay mucha gente que lleva mucho tiempo siendo diabética y no lo sabe. Se dice que hasta un 40 por ciento de la gente que tiene Diabetes no lo sabe y que siete de cada diez personas que la tienen no llevan un control y no van a consultar”, expuso.
Sin embargo, expuso que es un tema complejo el de las enfermedades metabólicas, como la diabetes y la dislipemia, porque es un tema de salud, pero también está ligado a un tema cultural como la alimentación misma.
“Hablamos de una alimentación basada en harinas, carbohidratos, grasas, cerdo; una gastronomía altamente calórica. Además, en investigaciones que he tenido oportunidad de hacer, sobre el conocimiento y percepción sobre la obesidad, vemos que hay lugares, municipios, donde se ve a la gente con sobrepeso como alguien sano, hermoso; el sobrepeso se ve como un síntoma de buena salud y no como un problema de salud”, expuso.
A lo anterior se suma, además, el estilo de vida “moderno” que ha elevado el nivel de estrés, el cual hace que las personas liberen más cortisol “y eso hace que desarrollemos el sobrepeso, obesidad, dislipidemia, que contribuye a aumentar y, por el mismo estrés, el que no come la comida grasosa come la comida rápida y eso también está contribuyendo”.
Agregó que también hay diversos estudios que dan cuenta que la gente de la región tiene una carga genética que genera una predisposición a desarrollar problemas metabólicos.
“Hemos trabajando en municipios como Kanasín y Umán, donde podemos decir que seis de cada 10 adultos tienen problemas de diabetes y es un problema muy grave, porque son enfermedades crónicas que además impacto a la salud, le cuestan mucho al gobierno”, mencionó.
Reiteró que es un tema bastante lamentable porque si bien hoy se habla de las muertes por COVID-19, pero también se dan muchos fallecimientos que derivan de las complicaciones asociadas con la Diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
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GH