Se calcula que el bloqueo a la zona arqueológica de Dzibilchaltún, debido a que ejidatarios de Chablekal exigen el pago por la expropiación de los terrenos que forman parte de este sitio turístico, ocasionó pérdidas de hasta por 100 mil pesos en un solo día, debido a que el sitio no pudo percibir ingresos por el pago de las entradas.
A las puertas del sitio arqueológico constantemente llegaron vehículos y taxis con turistas a bordo, que con la misma se daban la vuelta ante la negativa de acceso por parte de los ejidatarios.
En el lugar, se entrevistó a trabajadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Yucatán, con base en la zona arqueológica, quienes detallaron que, en los últimos dos meses, los viernes y sábados reciben un promedio de 400 personas por día, mientras que en domingo la cifra repunta hasta 900 visitantes.
Los empleados del organismo, que prefirieron no ser identificados, aseguraron que, por su cercanía con la capital yucateca, cerca del 40 por ciento de quienes asisten a la zona arqueológica deDzibilchaltún son extranjeros.
Agregaron que la entrada a la zona arqueológica está dividida en dos cuotas: una de 75 pesos que va a las arcas del INAH y otra que se queda en Yucatán, a través del Patronato de las Unidades de Servicios Culturales y Turísticos del Estado de Yucatán (Cultur), que es de 74 pesos para visitantes nacionales y 184 pesos para turistas extranjeros. Cabe destacar que la cuota federal se exenta los domingos.
Por lo anterior, se calcula que, de 250 nacionales y 150 extranjeros que se quedaron sin la oportunidad de acceder durante el sábado, la taquilla del lugar perdió cerca de 37 mil 250 y 38 mil 850 pesos, respectivamente, por cada una de las diferentes cuotas.
En cambio, ayer, en donde los sitios arqueológicos y museos de México suelen reportar un mayor flujo de visitantes, se estima que se perdieron cerca de 40 mil 700 y 64 mil 400 pesos por cada cuota, dando un total de 105 mil 100 pesos perdidos, sin contar el cobro exento por el INAH.
El bloqueo pacífico de los ejidatarios, realizado a manera de presión para que el INAH pague por las tierras que hace 62 años le quitaron a Chablekal, inició desde el mediodía del pasado viernes, tras un desacuerdo entre los quejosos y los representantes jurídicos del órgano federal.
“Decidimos tomar las tierras porque esto es de nosotros, es del ejido de Chablekal. Hasta ahora no hay arreglo, sólo promesas de parte del INAH. Entonces nosotros vamos a estar aquí hasta que ellos decidan terminar con el proceso”, declaró María Nilda Euán Chalé, tesorera del ejido.
Por consiguiente, los ejidatarios de Chablekal adelantaron que hoy sostendrán una nueva mesa de negociación con autoridades federales, en donde esperan llegar a un acuerdo para levantar el bloqueo.
“Se supone que vamos a hacer la firma del Convenio. Está programado con las autoridades federales de la Secretaría de Gobernación, Cultur, Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y todos los que están involucrados en el proceso de expropiación”, comentó Manuel Aban Can, comisario ejidal de Chablekal, quien pronosticó un buen resultado para las negociaciones.
Por último, el comisario ejidal advirtió que, en caso de no llegar a un arreglo con las autoridades, los 359 ejidatarios seguirán bloqueando el acceso a la zona arqueológica.
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GH