Representantes del Tecnológico Nacional de México (TecNM) campus Tizimín, no se presentaron ayer a las instalaciones del Comisariado Ejidal, a donde habían sido citados.
Por su parte, ejidatarios denunciaron que el pasado domingo, varios docentes de ese plantel acudieron a intimidarlos, cuando se encontraban realizando sus faenas en la parcela 1146, propiedad del ejido; comentaron que los maestros llegaron con la fuerza pública alegando que los campesinos estaban invadiendo la propiedad de la escuela.
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Ante dicho problema, integrantes del Consejo Ejidal llegaron al acuerdo de sostener una reunión ayer en la sede de la comisaría, a las 11:00 horas, en la que los reclamantes podrían comprobar con el título de propiedad que efectivamente les corresponde este polígono, cuya superficie es de siete hectáreas, 79 áreas y 0.396 centiáreas; finalmente, los ejidatarios esperaron inútilmente la llegada de la otra parte.
Al respecto, el Comisario Ejidal aclaró que en ningún momento los asociados están invadiendo alguna superficie que no le corresponda al ejido, sino que, desde que fue asignada esa superficie al ejido, siempre se le ha dado el mantenimiento correspondiente y desde la administración del director Carlos Durán Pérez alegaban que esa parcela le correspondía a la escuela; sin embargo, hasta la fecha no han demostrado con el título que le corresponde al plantel educativo.
Agregó que en el plano levantado por el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi), cuando el Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Titulación de Solares (Procede) asignó títulos a parcelas y solares, se delimitó el área que corresponde a la escuela, que se encuentra cercado con alambre de púas y postes de concreto; a la otra parcela contigua, que pertenece al ejido, la divide una mensura, que también está limitada por el ejido y de manera periódica mediante faenas se manda realizar la limpieza.
El pasado domingo, Baltazar L. Avilés con la fuerza pública acudió a la parcela que presuntamente estaba siendo invadida por los campesinos, en el lugar se encontraba el presidente del consejo de vigilancia Ramón Herrera, quien dio a conocer que no se estaba invadiendo ninguna superficie de la escuela, sino que esas tierras pertenecen al ejido y se encontraban haciendo faenas en el lugar.
Ayer, los ejidatarios, ante la ausencia de los reclamantes, levantaron el acta correspondiente a fin de presentarlo a la autoridad competente, para que los ejidatarios puedan continuar trabajando en el lugar sin ser perjudicados; asimismo, se integró una comisión auxiliar para coordinar los trabajos junto con el consejo de vigilancia.
El presidente del consejo ejidal, Manuel Jesús Balam Arceo, comentó que en ningún momento se están violando los derechos de alguna de las personas, sino que han sido respetuosos con las partes que fueron asignadas por el Procede en su momento, “todo lo que se hace en el ejido se realiza con trasparencia y en paz, desafortunadamente gente con malas intenciones siempre señala que el Comisario Ejidal y los campesinos les quitan o invaden terrenos, cuando en realidad desconocen cómo está el asunto de las tierras, y deben estar agradecidos con los ejidatarios, ya que gracias a ellos ha sido posible que el municipio se haya convertido en una de las urbes más importantes en el Sureste de México.
El Comisario explicó que esa superficie se piensa lotificar y asignar a los ejidatarios, a fin de que pueda crecer la mancha urbana y en su momento se asignarán las calles y áreas verdes al municipio para que lleguen en tiempo y forma los servicios básicos.
Certeza jurídica
Balam Arceo dijo que existen otros cinco polígonos, entre ellos la colonia Santa Rosa de Lima, que por años no ha sido regularizada por desidia de los comisarios anteriores y en ella muchas personas, que se ostentan como licenciados, han cometido múltiples fraudes, mintiéndole a la gente que pueden garantizarles el título de propiedad y al final sólo defraudan a la ciudadanía que necesita certeza jurídica de sus patrimonios.
Lorenzo Tun Fernández, ejidatario con derechos vigentes ante sus compañeros, refrendó su apoyo: “estoy con ustedes, si hay que pelear lo que nos corresponde con sangre, soy el primero en apuntarme”, externó el campesino, quien recibió el apoyo unánime de todos los labriegos.
Apolinar Dzib, quien cargo en el ejido, aclaró que este polígono que la escuela reclama como suyo, le corresponde al ejido y en ningún momento se están violando los derechos de la institución educativa.
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Los campesinos se organizaron y abordo de sus motocicletas, bicicletas y automóviles se trasladaron junto con la directiva del ejido a caminar por la superficie que están limpiando y que en un futuro no muy lejano formará parte de una colonia más en el municipio.