Al dar positivo a COVID-19 una maestra, se cerraron dos aulas de la Escuela Primaria, "Remigio Aguilar Sosa"; asimismo, le están dando seguimiento a posibles casos sospechosos de alumnos y de otra profesora para tomar cartas en el asunto.
Esto fue lo que reveló la directora de la escuela, Patricia Coronado Alamilla, exponiendo que una maestra de 45 años del primer grado Grupo A se empezó a sentir mal con dolor de cabeza y tos, por lo que al acudir a hacerse la prueba del coronavirus en un laboratorio particular, resultó positiva y ahora se está recuperando en su casa, por ende el grupo de niños (seis alumnos) al que atendía está en aislamiento durante 14 días.
Coronado Alamilla mencionó que también se tuvo que cerrar el primero B, un grupo contiguo a dicho salón, ya que la maestra al frente al ser su paralela de grupo se reunía con la docente infectada a planear y por tanto considerando que tuvieron contacto directo también se requirió su aislamiento.
Asimismo, los 12 niños de esta aula están en observación; considerando un periodo de posible incubamiento del virus, hoy la maestra del primero B se hará la prueba y si resulta negativa se incorpora con sus estudiantes a las actividades escolares el próximo lunes, pero si es positiva continuarán aislados hasta cubrir los 14 días establecidos.
Por todo lo anterior, la directora añadió que varios niños de los 45 que tomaban clases presenciales ya no acuden al colegio, pues los rumores de la presencia del coronavirus en la escuela está corriendo como pólvora y los papás tienen miedo de enviar a sus hijos a que se contagien.
Dijo que se está vigilando otro posible caso sospechoso, de una niña, esta de segundo grado, así como el de otra maestra, esta de sexto grado que tiene a su cargo cuatro estudiantes.
Puntualizó que no es justo que la SEGEY ahora después de enviarlos a trabajar a la escuela, esté abandonando a los profesores que tienen que sacar de sus bolsillos para solventar el costo de las pruebas de coronavirus, cuando presentan síntomas propios de este padecimiento, ya que esta no baja de entre 700 a 2 mil pesos y se ven obligados a pagarlas porque en el ISSSTE no hay pruebas.
Enfatizó que sería muy significativo que les pudiesen brindar el servicio de pruebas continuas, por lo menos cada 15 días en los planteles escolares, para que descarten que ninguna persona que conforma el personal esté infectada o que cursa la enfermedad de manera asintomática para que incluso estén laborando más tranquilos y sin el temor de que en cualquier momento también ellos podrían llevar el COVID-19 a sus hogares.
En entrevista con el Supervisor de la Zona Escolar, Francisco Loría Serrano, dirigiéndose a padres, maestros y alumnos exhortó a que se sigan cuidando, respetando estrictamente y desde casa las normas preventivas sanitarias, ya que esta es la clave para evitar más contagios.
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