En la Universidad Gastronómica Isima, en conjunto con la marca In Love, se llevó a cabo ayer el taller “Secretos de la cocina”, a cargo de Adlemi Briceño Duarte, cocinera tradicional desde hace más de 35 años, quien dijo que las tradiciones de cocinar como lo hacían los mayas se está perdiendo, por lo que a fin de rescatar los sabores que caracterizan a la cocina de Yucatán se dedica a la impartición de estos talleres, en esta ocasión preparó unos sabrosos papadzules.
Añadió que el curso busca rescatar el gusto por los verdaderos olores y sabores que caracterizan a la comida de nuestro Estado.
“Cocinar con leña, carbón o hacerlo enterrado hará que las comidas típicas se sientan más ricas y con un mejor sabor”, dijo Briceño Duarte, y advirtió que desafortunadamente se está perdiendo la gastronomía yucateca porque ahora se observa que la gente hace cambios a su modo, como preparar mucbipollos con camarón o jamón y queso, lo que considera que no es válido, ya que todas las comidas forman parte de una herencia que nos dejaron nuestros ancestros.
En cuanto a los papadzules, expuso que esta delicia gastronómica es un claro ejemplo de comida con influencias indígenas y mestizas. Explicó que esta suerte de enmoladas yucatecas consiste en tortillas de maíz, huevo cocido y pepita verde, cuyos ingredientes son semillas de calabaza y de hojas de epazote, que le da su característico color verde a la pasta, y salsa de tomate frito.
Añadió que su preparación es sencilla y no requiere de mucha inversión de tiempo. Se sumerge la tortilla en la pepita mezclada con agua, luego se pone el huevo previamente machacado para enrollar la tortilla en presentación a manera de taco, por último se le agrega encima la salsa de tomate.
También explicó que, para no perder lo tradicional, debemos consumir lo que es de nuestro Estado, ya que a pesar de que las recetas han ido cambiando porque fueron pasando de generación en generación, lo importante es no perder el gusto.
Adlemi nació en Chetumal, Quintana Roo, pero creció en la comisaría meridana de Molas, donde su madre Esperanza Duarte Ku le inculcó el gusto por la cocina yucateca.
Por último, aseguró sentirse muy orgullosa de saber cocinar esos manjares de nuestros ancestros mayas y que seguirá compartiendo con los estudiantes y público en general para no perder nuestras tradiciones.
Durante el curso se destacó que la gastronomía yucateca tiene un sabor diferente al resto de México, es resultado del sincretismo cultural que se dio en esta tierra entre mayas y españoles, y constituye uno de los principales referentes de la oferta turística del Estado. La inigualable conjunción de condimentos y especias tales como la pepita de calabaza, el orégano, la cebolla morada, la naranja agria, la lima, el achiote, el chile xcatic, el chile habanero, el chile max, y el cilantro, le dan ese sazón tan especial a la comida.
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CC