Pese a que las empresas de recolección de basura de Mérida mantienen protocolos estrictos para aminorar el riesgo de contagios entre sus colaboradores, como el uso de cubrebocas de triple capa desechables, fumigación constantemente en los vehículos y la sanitización de los recolectores, afirman que el contacto con los desechos relacionados con el COVID-19 es inevitable, y aunque los cubrebocas ya se consideran una nueva forma de contaminación a nivel mundial, la forma en la que la gente clasifica su basura juega un papel importante para la protección de los trabajadores.
“Podemos estar utilizando métodos y protocolos de sanidad con los recolectores, pero aun así están expuestos al estar en contacto directo con los desechos de toda índole, por lo que no solo están vulnerables al COVID como todos nosotros sino también a otros padecimientos y peligros en general, por eso siempre invitamos a la gente que separe su basura, que pongan una etiqueta si son químicos o médicos como jeringas, cubrebocas, artículos de hospital guantes y demás, y también si son latas, vidrios entre otras cosas que pongan en riesgo a los trabajadores” dijo Samuel May supervisor.
Señalo de igual manera, que los colaboradores están conscientes del riesgo al estar en contacto directo con estos residuos, por lo que el 90 por ciento, utiliza gel antibacterial después de recoger este tipo de desechos, además de el cambio de ropa tras su jornada laboral.
Por su parte, los recolectores comentaron que las empresas les facilitan los cubrebocas de triple capa para disminuir el riesgo de contagio, además de la sanitización antes de salir y después de llegar al deposito de basura, sin embargo, señalaron saber que están expuestos al contagio, pero es un riesgo laboral implícito que tienen al entrar a trabajar a un servicio de limpieza.
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“Sabemos perfectamente a lo que nos estamos arriesgando, y no solo nosotros, cualquier persona que se dedique a la limpieza, ya sea como recolector, pepenador, camarista, intendente y demás, es un riesgo pues estas en contacto con los desechos y residuos de la gente y no sabemos si nos vamos a contagiar o no, queda en nosotros cuidarnos lo más que se pueda y que Dios nos bendiga” finalizó Carlos Moo.
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CC