Una joven cobrataria nunca imaginó que a minutos de culminar su jornada estaría en el hospital curándose de varias lesiones, pues tras haber visitado la comisaría de Flamboyanes sufrió un encontronazo con un vehículo de mayor dimensión, justo a la salida de dicha comunidad.
El percance ocurrió alrededor de las cuatro de la tarde, en el punto mencionado, donde también se encuentra un retén de la policía estatal, por lo que las asistencias no tardaron en hacerse presentes y solamente se esperó a una ambulancia de la cruz roja desde Progreso.
El choque produjo que la motociclista de aproximadamente 30 años, terminara en el pavimento caliente, llevándose varios golpes que incluso le produjeron daños en la vestimenta. Para su fortuna, el casco tipo “micrófono” la salvó de no llevarse un hematoma, pues la protegió cuando la cabeza de la mujer azotó.
La contraparte se trató de tres trabajadores del sector pesquero a bordo de una camioneta marca Nissan, quienes al ver el estado de la afectada procedieron a estacionarse y brindarle ayuda en lo que llegaba la asistencia de los socorristas que circulaban a toda velocidad por la carretera.
Por su uniforme color rosa, se supo que la agraviada era trabajadora de “compartamos banco”, empresa dedicada a otorgar créditos que durante la tarde de este lunes había mantenido en Flamboyanes a una de sus elementos para hacer sus respectivas diligencias.
Caso extraño del percance sucedió con los mismos paramédicos, a los que la involucrada no accedió a proporcionar sus datos generales y dejó que todo fuese arreglado por vía de sus jefes, quienes llegaron de inmediato con otros elementos de la empresa mencionada para iniciar un proceso respecto a la reparación de daños a la moto Italika que conducía la fémina.
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AA