Con la llegada de la temporada de estiaje, el riesgo por incendios forestales aumenta. En las últimas semanas, el Estado de Campeche es el lugar en la región con mayor número de hectáreas afectadas por este tipo de siniestros; sin embargo, en los últimos tres años, Quintana Roo es el que más complicaciones ambientales tiene con el fuego en la selva.
Según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Gerencia de Fuego de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), en los primeros meses de 2022 se han reportado tres incendios forestales en Campeche, con los que se han siniestrado 9 mil 39.59 hectáreas.
En promedio, cada incendio registrado en lo que va este año en Campeche ha arrasado con 3 mil 13 hectáreas de selva. Después de Chiapas, la Conafor considera que Campeche es el Estado con mayor daño por esta causa en este 2022.
Los datos sobre incendios acumulados en 2022, hasta el corte del 7 de abril pasado, señalan que se han consignado cinco alertas y 170 hectáreas afectadas por incendios forestales en Quintana Roo. En Yucatán, por su parte, hubo dos llamados para apagar el fuego y 166.22 hectáreas de terreno afectadas.
Un dato destacable es que, a pesar de ser el punto peninsular con mayor daño por estos incidentes, Campeche tiene sólo 128 agentes federales atendiendo los siniestros, frente a los 711 elementos de Quintana Roo, que han sofocado las cinco alarmas de emergencia. Finalmente, Yucatán cuenta sólo con 107 personas.
Es motivo de atención para la Conafor, según lo publicado por este diario en la edición del 5 de abril pasado, las zonas donde Campeche tiene sus incendios. El fuego ha consumido la zona interior de la Laguna de Términos y el Área de los Petenes, que siguen amenazadas. La Laguna de Términos tiene 705 hectáreas de extensión, según la información de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, y un perímetro de 67 mil 307 hectáreas de manglar, 106 mil hectáreas de Tular y 21 mil 237 hectáreas de selva mediana.
Entre las especies representativas de esta Área Natural Protegida se encuentran el pucté, tinte, jobo, palo de rosa, guayacán, mata de gusano, palo mulato, caoba, cedro, mangle rojo, negro y blanco.
Otra zona de interés es Muna (Yucatán), donde hay un incendio activo que es atendido. Este punto está en la zona limítrofe con el municipio de Calkiní (Campeche) y de no controlarse, podría impactar la zona que une a los Estados.
Los datos de acumulación de reportes publicados por Semarnat apuntan a que es Quintana Roo el Estado con mayores problemas de este tipo. En 22 años, en Quintana Roo se han acumulado 780 reportes; en Yucatán, cerca del primer lugar, totalizó 569 alertas y Campeche, que presentó 207 denuncias.
El año 2011 fue un año complicado para Quintana Roo, en el cual alcanzó su pico con 132 alertas. En el mismo periodo, Campeche también llegó a su máximo de complicaciones por incendios: un total de 34 en un año.
Yucatán tuvo su peor año en 2016, cuando acumuló 155 llamados por incendios en su territorio.
Si se toman en cuenta el número de hectáreas dañadas, Quintana Roo sigue con el primer lugar en afectaciones. De 2019 a 2022 tuvo un total de 56 mil 522 hectáreas quemadas y durante 2020 se perdieron 41 mil 678 hectáreas de selva.
Le sigue Campeche, donde se han dañado 36 mil 662 hectáreas. Su peor año fue 2019, cuando se incendiaron 14 mil 647 hectáreas de terreno. Finalmente, Yucatán en estos últimos años, ha sido la Entidad que menos extensión ha perdido, ya que en total fueron 3 mil 252 hectáreas.
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JG