Luciano Martínez Tzuc e Irving Suárez Pérez, activistas que elaboraron la primera agenda política LGBT en Progreso con el objetivo de promover la cero discriminación en sociedad para este sector, terminaron huyendo del municipio a causa de la intimidación policiaca.
Luego de realizar hace una semana la sexta Marcha de la Diversidad Sexual con cerca de 2 mil participantes de todo el estado e invitados de diversos rubros, los activistas renunciaron al Ayuntamiento que preside el e alcalde Julián Zacarías Curi, luego de que aseguraran que surgieron una serie de atropellos en contra de ellos como lo fue el acoso laboral y la presión para renunciar.
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Entrevistado vía telefónica, Luciano Martínez aseguró que su alianza con el actual primer edil comenzó en tiempos de campaña donde se les aseguró que tendrían la función de asesorar la Unidad Municipal para el Desarrollo e Inclusión de la Diversidad que, hasta hoy, está en manos de Azyadeth Betancourt Vidal.
“Todo se vino a debacle después de que nos convertimos hace un par de meses en la primera pareja en Yucatán en casarse sin la necesidad de un amparo, queríamos hacerlo en la playa y nos negaron aquello. En mi caso fui removido en las semanas posteriores del departamento de Desarrollo e Inclusión rumbo a la Dirección de Pesca; opté por renunciar el jueves de la semana pasada, solamente mi esposo se quedó trabajando en el Ayuntamiento en el área de Desarrollo Social” dijo.
También agregó el entrevistado que el sueldo que percibía era de sólo de 3 mil pesos a la quincena sin ninguna otra prestación, incluso negándole la administración permisos y peticiones para ausentarse por motivos de salud.
“Sabemos cómo trabaja la policía en Progreso, nos da miedo ser agredidos y por eso abandonamos el departamento del puerto para retornar a la ciudad de Mérida, aunque seguiremos trabajando con nuestro comité de la diversidad sexual a favor de la misma comunidad”, manifestó Martínez Tzuc.
Parte del hostigamiento que aseguran ha venido de parte de la Policía comenzó en medio de la sexta marcha de la diversidad sexual de la tarde del pasado sábado cuando al intentar darse un beso a las puertas del Palacio Municipal, varios agentes policiacos aseguran intentaron intimidarlos.
“Nos apena ver que no hay inclusión en el Ayuntamiento, el departamento de la diversidad sexual no prospera, cuando se presentan eventos son desechados”, especificó el entrevistado.
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CC