Luis Mazún y María Teresa Mazún estuvieron a nada estuvieron de convertirse en víctimas de un intento de fraude en el municipio de Tizimín
A través de anuncios y mensajes por WhatsApp les ofrecían despensas y artículos del hogar a un precio casi regalado, solicitándoles que depositen cierta cantidad en un número de cuenta.
Noticia destacada
Violencia familiar en Tizimín, al alza; Policía Municipal registra al menos un caso al día
Ellos viven en la calle 33 No. 460 entre 62 y 64 y compartieron que por su rumbo se estaban repartiendo volantes y se pegaron anuncios en varios establecimientos comerciales, en los que se mencionaba que quienes no cuenten con algún programa soliciten su despensa gratuita al teléfono 9994133449 de 9:00 a 18:00 horas con el Lic. Andrés Medina Vargas, supervisor de dicho programa, por lo que entre vecinos los comentarios y el interés no se hicieron esperar.
Externaron que de pura curiosidad llamaron. Señalaron que los delincuentes demostrando su astucia, incluso, no contestaron a la primera como estrategia para que la gente realmente interesada vuelva a marcar. Al contestarles, el supuesto licenciado aseguró que se trataba de una contribución social que emanaba de una asociación civil independiente ubicada en el Centro de Mérida.
Mencionaron que era sólo un gancho, pues al quedar registrado el número de la posible víctima, le mandaban un sinfín de mensajes y estados de WhatsApp donde mencionan un sinfín de apoyos que se entregarían a domicilio este 24 de julio y se pagarían antes de las 16:00 horas, externándoles que no había límite, que podían pedir lo que requieran, pues el apoyo es para todos y no importa que ya cuenten con otros.
Entre ellos, ofrecían estufa Mabe de 6 quemadores de 30 pulgadas en 2 mil pesos; colchón individual o matrimonial marca América en 500 pesos; tanque de gas de 20 o 30 kilos lleno en 500 pesos; refrigeradores en 4 mil pesos o en caso de que entreguen uno viejito les costaría 2 mil pesos, porque 45 de la marca Samsung de 18 pulgadas eran subsidiados por la CFE, entre otros, y que hay folios disponibles hasta agotar existencia, explicando que la dinámica es mandar nombre y dirección para generar la orden de entrega.
Al interesarse por un refri se les asignó una cuenta para realizar el depósito, señalándoles que se dan en un solo pago y tras realizarlos mandar captura clara para meter reporte y dar seguimiento, indicándoles que en la entrega sólo debían presentar una copia de INE y otra del comprobante de pago
Dijeron que por poquito se la creen, hasta que reflexionaron en que toda la gente que ya se inscribió en su domicilio recibiría cada despensa o artículo, lo cual sería casi imposible, pues por tantos interesados se tendría que desplegar un ejército de gente para trasladarlas y por ninguna parte de la ciudad se observaba tal movilización que ya se hubiera hecho pública, por lo menos en las redes sociales.
Reflexionaron que en estos tiempos nada es gratis, pues el gancho de la despensa era gratuita cuyo costo ascendía a más de mil pesos solo para que se interesen, llamen y registren el número, para que después les manden el catálogo de artículos con precios a tan mínimo costo e indicaron que también son conscientes de que tampoco se los pueden casi regalar, por lo que exhortan a que la gente no se deje engañar, pues resulta obvio que se trata de delincuentes malintencionados que pretenden estafar a los habitantes que caigan en sus engaños.
Síguenos en Google News y recibe la mejor información
CC