Parte de lo que atrajo este domingo las miradas de decenas de turistas del puerto de Chelem fue el varamiento de un delfín gigante de la familia Tursiops truncatus, conocida popularmente como “nariz de botella”, las cuales habitan normalmente poblaciones del noroeste del mar atlántico y el Golfo de México.
El hallazgo ocurrió por vía de bañistas que al caminar en la zona de arena paralela a las calles 12 y 14, llegando de manera gradual cada vez más curiosos que no quisieron dejar pasar la oportunidad de fotografiar el momento a pesar del mal olor y peces muertos que se avistaban a su alrededor.
El varamiento se puntualizó como parte de los múltiples efectos de la marea roja en todo el litoral oriente y poniente, por lo que se siguen propiciando afectaciones al ecosistema del mar de Progreso. Entre las cualidades de la especie, se destaca que se trató de un ejemplar de dos metros con 75 centímetros y un cuarto de tonelada de peso que obligó a las autoridades municipales a realizar protocolos urgentes con el animal marino gigante.
A la llegada de los policías ecológicos, el delfín “nariz de botella” sacado del mar y enterrado para su posterior necropsia en días próximos a cargo posiblemente del Programa de Investigación de Mamíferos Marinos en el estado de Yucatán, perteneciente a la UADY y que dirige el Doctor Raúl Díaz Gamboa.
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JG