El diálogo entre los ejidatarios, artesanos, ambulantes y guías de turistas de Chichén Itzá con funcionarios del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) continúa para llegar a un acuerdo, por lo que se descarta una nueva manifestación.
Hoy vence el plazo para la entrega de los primeros acuerdos del pliego petitorio establecido por los inconformes, que se empiezan a resolver por las reuniones diarias efectuadas desde el pasado jueves 12.
De acuerdo con la información proporcionada, “continúan las reuniones con los ejidatarios para dar respuesta a sus solicitudes de apoyo”, para llegar a un mutuo consenso, tal como se acordó el pasado miércoles 11, cuando se levantó el plantón”.
Los inconformes dieron de plazo hoy para que el Gobierno federal entregue las respuestas a su pliego de petitorio, que se han presentado a lo largo de las mesas de diálogo efectuadas en el transcurso de la semana.
Por ende, se descarta una nueva manifestación por los primeros acuerdos ya establecidos, aunque no se especificaron los logros, para no entorpecer el desarrollo de las reuniones efectuadas en la zona arqueológica.
En promedio, a la ciudad prehispánica acuden cerca de 7 mil paseantes, y tan sólo en el primer día de arribo turístico, el pasado jueves 12, ingresaron cinco mil 911 visitantes.
El cierre
La protesta, que conllevó el cierre de la carretera 180, específicamente en el tramo de Xcalakoop-Pisté, duró 10 días, lo que impidió que a Chichén Itzá dejaran de arribar 70 mil personas, generando una pérdida de 20 millones de pesos por el pago para ingresar al sitio.
Durante ese período los turistas afectados fueron trasladados a Izamal y Ek’Balam, por lo que se registraron arribos masivos a ambos sitios. De acuerdo con los informes, en la manifestación se contó con la participación de mil 124 personas, todos ellos pobladores de Tohopkú, San Francisco, Chankom, Xcalacdzonot, Pisté, Xcalakoop y San Felipe Nuevo.
Incluso, todos ellos firmaron el documento y entregaron su respectivo folio del Instituto Nacional Electoral (INE), para interponer denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR), Secretaría de la Función Pública y Comisión de los Derechos Humanos en Yucatán (Codhey).
Sin embargo, el pasado jueves 5, el director de la Zona de Monumentos Históricos de Chichén Itzá, Marco Antonio Santos Ramírez, interpuso un par de denuncias, del fuero común y federal, en contra de los ejidatarios, artesanos, ambulantes y guías de turistas de Chichén Itzá, por los delitos de calumnias, daño moral y amenas de muerte.
En la Fiscalía General del Estado (FGE) interpuso la denuncia penal, catalogada como el expediente número G8/67/2023, por los delitos de calumnia y daño moral, ante las declaraciones formuladas por los inconformes que desde el pasado lunes 2 han tomado la carretera federal que conduce a la zona arqueológica.
En la querella se denunció al comisario ejidal de Pisté, Armando Dzul Mex; al representante de la agrupación de choque, Arturo Ciau; a las representantes de Artesanos, Silvia Cimé Mex y Teresa de Jesús Díaz Santamaría; los artesanos Pablo Euán Cen y Luis Mis; el regidor de Tinum y guía de turistas, Carlos Galdino Nahuat Mex; el secretario de Asuntos Indígenas de Yucatán, Arturo Ciau Puc, y contra quien resulte responsable.
Mientras que en la denuncia interpuesta en la FGR fue por el delito de amenazas de muerte por parte de los antes mencionados, en especial de Luis Mis, a quien recientemente se le detuvo una obra, ya que con maquinaria pretendió dañar el patrimonio cultura de la zona arqueológica.
Posteriormente, el martes 10, Santos Ramírez acudió al Ministerio Público de Valladolid para ratificar su denuncia de amenaza de muerte contra los manifestantes.
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AA