Ha dado comienzo la especial restauración de la Iglesia Santo Domingo de Guzmán que se ubica en la plaza principal de este municipio en el Oriente del Estado, esto como respuesta a las múltiples solicitudes realizadas tanto por los feligreses de la comunidad como por parte de las autoridades, se ha mencionado que es la primera ocasión en más de dos décadas que esta obra es intervenida, desde la vez que fue rehabilitada por ahí del año 2001. La obra de restauración de las mandalas y los centenarios muros de esta iglesia parroquial está siendo realizado por personal profesional del Instituto Nacional de Antropología e Historia, por sus siglas INAH. La especial intervención a esta tarea arquitectónica es realizada con el beneplácito de la comunidad, que ve en esto una oportunidad para salvaguardar y conservar esta valiosa obra que da imagen e identidad a su municipio.
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Los vecinos dieron sus impresiones sobre este trabajo que se desarrolla en el templo principal, por ejemplo, José Guadalupe Tax Koyoc mencionó: “Gran parte de todo el edificio ha sufrido el evidente desgaste el tiempo y de los factores climatológicos de exceso de humedad, entre otras cosas, por ejemplo dentro del edificio muchas de las mandalas y adornos ya lucen lastimados y muy desgastados, las gestiones por parte de la comunidad desde lo civil y por parte de la parroquia llevan varios años tocando puertas. Qué bueno que ahora se ha dado respuesta favorable para darle el mantenimiento óptimo a nuestra iglesia”.
La autoridad local informó de manera fugaz sobre esta obra emprendida. El corto texto publicado en su página oficial se limita a exponer: “La gestión ya se está haciendo realidad. Rehabilitación de nuestro hermoso exconvento de Santo Domingo de Guzmán, al mismo tiempo que se está desarrollando la remodelación de nuestro parque principal esto buscando siempre dar una buena imagen a la comunidad.”
Con este corto mensaje se informó a la ciudadanía y comunidad en general. En tanto que se espera que, en próximos días, la parroquia o la autoridad local informe a la comunidad sobre estas intervenciones que se realizan al labrado y querido patrimonio cultural de este municipio.
Uno de los vecinos de la comunidad de nombre Antonio Baas comentó: “Qué bueno que estos trabajos están siendo realizados por varias personas profesionales en la materia, porque siendo algo delicado de hacer lo debe hacer una persona conocedora, que logre cuidar y valorar esta iglesia que es, creo, la única en todo Yucatán con esta fachada”.
En tanto, el frontispicio de la iglesia se ha visto lleno de andamios metálicos, tablas y materiales propios, que son utilizados por los trabajadores que, según se ha señalado, son del INAH que se han subido a tomar muestras de los materiales contenidos y han comenzado a levantar un estudio detallado de la situación en las que se encuentran toda la obra, para la inmediata intervención adecuada para su conservación.
La actual parroquia de San Antonio de Padua de Uayma fue originalmente un pueblo de visita franciscana y posteriormente convento de la misma orden seráfica, pasando a manos del clero secular a principios del siglo XIX. En tanto, la peculiar obra de sus muros adornados con especial estilo barroco, de especial sabor vernáculo yucateco, no se sabe con precisión a quién se debe. Es probable que, a la moda barroca predominante en el siglo XVIII, alguno de sus administradores apostólicos se luciese con vestirla sus muros de estos ornatos.
Lo cierto es que, desde su restauración realizada a principios de este siglo que constó en limpieza, rehabilitación y pintura, volvió a este edificio religioso en un punto de atracción de la región, que atrae al turismo nacional y extranjero por la muestra particular que la reviste, siendo pocos los estudios arquitectónicos e históricos desarrollados que ayuden a visualizar el origen de este templo, icono e imagen que representa a esta comunidad.
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CC