Esta mañana en el Aeropuerto Internacional de Mérida, pasajeros del vuelo 1100 de VivaAerobus se llevaron tremendo susto cuando el capitán de la aeronave con matrícula XA-VBW se vio obligado a elevarse de manera repentina al darse cuenta de que en la pista todavía se encontraba otro avión de la misma compañía.
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De acuerdo con versiones de los pasajeros de ambos vuelos, el avión con matrícula XA-VBW procedente de Monterrey todavía no abandonaba la pista 10-26 cuando observaron que otro se aproximaba para aterrizar.
De pronto a escasos 20 metros de altura la nave abortó la maniobra y volvió a elevarse casi verticalmente cómo si estuvieran en la montaña rusa.
Otros pasajeros manifestaron que después de dar una vuelta la tripulación del aeroplano les informaron que no pudieron bajar en el primer intento porque la pista estaba ocupada.
Por fortuna todo quedó en un susto y no en una tragedia. No se reportan personas lesionadas y después de unos minutos, pasajeros y tripulantes pudieron descender del avión.
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AA