Socorristas de la Cruz Roja expusieron sus vivencias a través de la galería “Héroes Anónimos”, misma que retrata a través de la fotografía periodística varias de las tragedias que se han suscitado dentro del puerto en los últimos dos años.
Fue en la “Sala Juárez” del palacio municipal cuando se emprendieron protocolos para dar bienvenida a representantes de esta organización como la presidenta de la delegación Progreso Aurea Elena Gómez Novelo y el teniente de fragata de la Décimo Tercera Zona Naval, José Efraín Canto Hernández.
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Posteriormente, al discurso de bienvenida donde se informó sobre los logros del organismo, se procedió a hacer una entrega de reconocimientos tomando en cuenta hasta a tres elementos de la comisión nacional de emergencia 31059 que recurrentemente son parte de los operativos donde hay vidas en peligro.
Entre los paramédicos más aplaudidos estuvo el escuadrón femenino a cargo de tres elementos que sin temor al riesgo que implica su labor han ofrecido su integridad a cambio de salvar vidas. Prueba de que este puesto a veces resulta complicado para los socorristas, ocurrió hace un par de semanas, cuando se adentró una ambulancia en los terrenos de invasión en Flamboyanes y terminaron lapidados.
También se resaltó la labor de Ángel Lavalle, pues parte de su trabajo es con los jóvenes voluntarios que poco a poco han adquirido conocimientos en primeros auxilios, se destacó a Raúl Contreras como referente y líder en sus turnos de trabajo.
Otro socorrista que fue reconocido fue Alberto Sosa, quien incluso sacrificó su último cumpleaños para operar durante las fiestas carnestolendas, donde le salvó la vida a un menor que resultó herido en la cabeza con una botella de vidrio que salió disparada en medio de una trifulca dentro del malecón tradicional.
“No es para nada sencilla la vida del paramédico, sobre todo si se toma en cuenta la cantidad de tragedias que ve frente a sus ojos y las incomodidades que puede pasar. Es un don de servicio y un honor portar el uniforme de la cruz roja” externó Martín Díaz Poumian, quien aprovechó a mencionar que su mayor motivación está en su padre, conocido locatario del mercado municipal “Francisco I. Madero”.
El recorrido para explicar cada una de las fotografías que serán expuestas a lo largo de esta semana, incluía desde choques automovilísticos hasta atenciones como los “golpes de calor” que se han presentado en estos últimos días de junio.
Uno de los testimonios que dejó helados a los presentes fue el de Gerardo Jesús López Alcalá, quien habló de la tragedia en la carretera rumbo a Cancún, Quintana Roo, el pasado mes de enero del año pasado, en el que salvó varias vidas tras sacarlas de un camión que se había volteado.
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AA