La comisaría de Flamboyanes sigue acumulando desgracias, pues durante la mañana de este viernes sorprendió a los habitantes de la zona de invasión un incendio que dejó en estado de pérdida total a los inquilinos de una casa de cartón.
Fue en las entrañas de esta zona, justo al fondo de la mitad del tramo, cuando alrededor de las 12 del día, las familias vieron salir humo de una de las casas hechas con cartón y lámina, optando por tocar la puerta en repetidas ocasiones, pues no se notó salir a nadie.
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El miedo causó mayor impacto cuando se escucharon constantes ladridos de un can del interior, mismo que resultó estar amarrado e indefenso para salvar su integridad. A pesar de que se intentó rescatarlo, el fuego se volvió incontrolable y solo quedó avisar a las autoridades ante la falta de agua en esta zona habitacional de pobreza extrema.
Cuando el fuego se volvió incontrolable, los colonos se alejaron; sin embargo, con la caída de parte del techo, con riesgo de quemarse, un par de vecinos aledaños sacaron al can, quien terminó con quemaduras leves que no pusieron en peligro su vida.
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Trascendió que el dueño de la casa es Antonio “N”, masculino de aproximadamente 30 años de edad que vive con un joven y una joven no mayores a los 25 años de edad. Los tres se encontraban fuera de este domicilio y se mantenían en sus labores cotidianas, por lo que fueron contactados por otros vecinos.
Mientras tanto, bomberos de la unidad de rescate y auxilio de la SSP se dedicaron a apagar el conato de incendio, el cual consumió en su totalidad las paredes y techo de material vulnerable. También se quemó un colchón y diversos objetos personales de los habitantes.
Con cierto temor, varios testigos, afirmaron que el culpable fue un jovencito de tan solo 16 años de edad, quien resultó ser sobrino del dueño del predio de invasión. Justo el jueves por la tarde, ambos habían tenido una discusión que llegó a los golpes.
“Lo vimos llegar y merodear la casa, apenas nos metimos a la nuestra para evitar problemas con el joven, sentimos el olor a quemado y lo vimos correr varios metros lejos de aquí” externó I.C.N., uno de los habitantes del área de casas de cartón.
Trascendió también que no es la primera vez en que se mete en problemas el menor de edad, pues ha tenido conflictos desde que llegó a esta zona poblacional luego de permanecer en un anexo por problemas de drogadicción.
Posteriormente, fueron allegados del jovencito quienes lo llevaron rumbo a las oficinas donde labora personal del comisario Carlos Noyola Sosa, por lo que se procedió a darle seguimiento al problema con autoridades como la Fiscalía General del Estado con sede en el puerto, donde se confirmó que habría demandas para el adolescente por lo sucedido.
Debido a que el menor seguirá libre, los vecinos no tardaron en manifestarse a través de redes sociales, pidiendo a las autoridades tomar cartas en el asunto, pues se teme que este hecho suceda ahora con otro familia y no haya intervención a tiempo para salvar las integridades de los involucrados.
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GC