Yucatán se sumará al “concierto” de puertos de altura que tienen una posición estratégica y a los que el Gobierno federal dejará en manos estatales para que puedan asociarse con el sector privado, atraer inversión y mejorarlos para importación y exportación de mercancías, sin perder la rectoría.
En el caso de Progreso, su gran valor radica en la facilidad de conexión con los de la Costa Este de Estados Unidos y también para enlazarse con otros de Europa.
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Puerto de Altura de Progreso se modernizará bajo el control del Gobierno de Yucatán
Como informamos ayer, este viernes 26, el Congreso sesionará para reformar la Constitución Política del Estado para abrirle la puerta a la Operadora Energética y Marítima de Yucatán, Sociedad Anónima de Capital Variable”, que se encargará de administrarla a nombre del Estado y tener la “libertad” dades de asociarse con el sector privado.
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Según la Federación, los principales puertos que operan como administración portuaria integral (API) estatal en México son: Altamira, Tamaulipas; Tuxpan, Veracruz; Coatzacoalcos, Veracruz; de Dos Bocas, Tabasco; y el de Ciudad del Carmen, Campeche.
Los que operan como API federal son: Manzanillo, Colima; LázaroCárdenas, Michoacán; Ensenada, Baja California; Guaymas, Sonora; Topolobampo, Sinaloa; Mazatlán, Sinaloa; Puerto Vallarta, Jalisco; Veracruz, Veracruz; Tampico, Tamaulipas; y, hasta ahora, Puerto Progreso, pero pasará a ser administrado por el Gobierno estatal, bajo el esquema que analiza el Congreso del Estado.
Con las reformas, el Legislativo busca el control del Gobierno del Estado, con participación de socios de capital privado, aunque no tendría las siglas API-Estatal, sino “Operadora Energética y Marítima de Yucatán, Sociedad Anónima de Capital Variable”.
Este viernes se confirmará la reforma que ofrecerá alternativas para que el director general y los consejeros de esta empresa sean nombrados por el gobernador Mauricio Vila Dosal, a pocos meses de que finalice su mandato.
Este director y los consejeros serían nombrados por el Ejecutivo y ratificados por el Congreso por ocupar el cargo por 10 años, lo que, según se entiende, busca garantizar la continuidad. Tal como lo hizo con el segmento del Transporte y otros puestos de trascendencia.
Durante la lectura de su informe, el gobernador Mauricio Vila garantizó que los trabajos del Puerto de Altura de Progreso continuarán, pues creará un fideicomiso para que la inversión de tres mil 63 millones de pesos. Con esto se busca la ampliación de la plataforma de 32 a 72 hectáreas, un dragado para llegar a los 13 m de profundidad, ampliación del ancho del canal de acceso: de 150 a 180 metros, lo que permitirá recibir barcos de carga con mayor capacidad y también cruceros con mayor cantidad de pasajeros.
Como antecedente, cabe recordar que la empresa italiana Fincantieri firmó una carta de intención para instalar y operar un astillero, con una inversión en la primera etapa de 150 millones de dólares y con la opción de sumar 500 millones de dólares en un mayor plazo, con la generación de miles de empleos directos e indirectos para los habitantes del puerto.
Esto permitirá a la entidad y al puerto contar con un calado más competitivo a nivel mundial, para recibir embarcaciones de mayor tamaño; actualmente, pueden ingresar navíos con cargas de 36 mil a 40 mil.
En el tema turístico, los cruceros que arriban ahora cuentan con capacidad para 2 mil 500 viajeros; con las ampliaciones, la cifra aumentará a entre siete mil y ocho, por lo que, los barcos que, hoy, llegan a Cozumel, puedan llegar a Puerto Progreso.
No obstante, todos los puertos mexicanos son propiedad de la nación, indistintamente del esquema de administración, estatal o federal. México tiene poco más de 11 mil kilómetros de costas, y está situado en una excelente posición en el Océano Pacífico y Atlántico lo cual lo hace un País altamente competitivo en el ramo marítimo.
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NM