Como marcan las tradiciones y las costumbres del Convite, las hermosas estampas yucatecas, plagadas de colorido, algarabía y ambientadas por los ritmos de la jarana pusieron a Tizimín en los ojos del mundo matizándolo de principio a fin como parte de los elementos que le proporcionan identidad a esta fiesta del pueblo.
Los grupos jaraneros con su presencia refrendaron su compromiso de hacerse partícipes en la Feria de Reyes y enaltecerla con su arte como atractivo que deje huella imborrable de cómo se disfruta la herencia cultural que nos heredaron nuestros antepasados.
Previo a la salida del Convite, desde las 9 de la mañana la gente podía disfrutar de la música de la jarana y de la actuación de varios ballets folklóricos de varios Diputados de Feria frente al palacio municipal, los jaraneros y mestizas de todas las edades, conformados por niños hasta por personas de la tercera edad portaban con garbo el traje regional presentando sus mejores coreografías y pasos que distinguen el folklore yucateco de esta Tierra de Reyes.
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Cada uno de ellos ponía de manifiesto la pasión por el baile autóctono y el orgullo de ejecutarlo para deleite de las cientos de personas que se congregaron en el centro histórico para disfrutar de este arte.
Tras la salida del Convite varios grupos de ballets independientes y de personas que aman el folklore yucateco no dudaron en continuar desarrollando estos bailes al ritmo dela charanga a lo largo del recorrido, imprimiéndole ese ambiente festivo y bullanguero que lo caracteriza y atrayendo las miradas de las personas con las que se encontraban a su paso.
Las presentaciones de los bailables también se ejercían en las casas de los Diputados de Feria donde la gente los ovacionaba y los aplaudía como reconocimiento al arte que plasmaban en sus coreografías y en sus distintas suertes.
A las afueras de estas viviendas y durante el trayecto también se hicieron presentes los bailadores, incluso varios de ellos sin portar el traje regional, evidenciando el disfrute de la jarana en su máxima expresión generando un verdadero ambiente de fiesta que contagiaban a los presentes, pues mientras unos admiraban sus ejecuciones, otros no dudaban en sumarse a estos danzares llenos de algarabía viviendo en carne propia esta gran fiesta regional.
En la plaza de toros donde hace la parada de descanso este derrotero cultural también se volvieron a dar cita los grupos folklóricos para deleite de las personas que admiraban su danzar que concluyó en el centro de la ciudad después de haber visitado las nueve casas de los Diputados de Feria y la del Presidente de Alborada y gremio de Velas y ramilletes.
No se hizo esperar el baile de la actual Reina de la Feria, Darelle Caballero, quien aceptaba la invitación a bailar de quien se apareciera en su camino para contagiar su pasión por la jarana y el folklore tizimileño en su máxima expresión.
En cada casa la gente era recibida con comida y bebidas que se les ofrecía como invitados de honor para que continúen su caminar en este derrotero, mientras escuchaban el mensaje de cada Diputado, en su exhortó a que las tradiciones y costumbres de Tizimín se mantengan vivas.