Una mujer estuvo a punto de perder 18 mil pesos mediante el juego de las canicas que promete dar artículos electrónicos en el estacionamiento de la plaza Las Abuelitas en Tizimín, donde se solicitó la presencia de policías, por lo que los delincuentes no tuvieron otra alternativa más que devolver lo robado.
El suceso ocurrió en el estacionamiento de la plaza de Las Abuelitas, la ciudadana fue apostando poco a poco una fuerte suma cuando notó que había sido víctima de una estafa, por lo que rápidamente pidió la intervención de la Policía Municipal que en cuestión de minutos llegó al lugar.
Los estafadores al ver la presencia de los agentes decidieron devolver el dinero a la afectada, los uniformados solicitaron los permisos correspondientes, pero no contaban con ellos, por lo que los elementos procedieron a retirar las cajas de los electrodomésticos que estaban vacías y sólo servían de pantalla para hacer más creíble el juego.
mbos delincuentes fueron conducidos al Cuartel Morelos para definir su situación jurídica, y quedó a disposición de la Policía un vehículo Camaro con el que se trasportaban los estafadores.
Fraude con el juego de las canicas
Este tipo de fraude que está de moda es el juego de las canicas que se aplica a las personas mayores, dónde los embaucadores colocan una carpa en los estacionamientos de los supermercados.
La dinámica está diseñada supuestamente para ganar un electrodoméstico, pantalla, celular, tableta u otro aparato; sin embargo, eso nunca sucede, pues está planeada siempre para perder, y este engaño se aplica también en las ferias.
El modus operandi consiste en invitar a la gente a realizar el juego de las canicas, les entregan un boleto que es gratis en los primeros rounds, no ganan, pero acumulan 50 puntos y dicen que falta poco para triunfar, por lo que convencen a la gente a seguir apostando 100 pesos. Mediante un conteo rápido dicen que faltan pocos puntos para la meta, por lo que los participantes siguen apostando. El juego está diseñado para no ganar.
En la dinámica también hay cómplices que motivan a la gente a seguir dando dinero porque dicen que con tan sólo 300 pesos se habían ganado una pantalla o hasta un refrigerador.
GC