La inversión de los fondos de retiro de los trabajadores del Ayuntamiento de Mérida en la Casa de Bolsa Bursamétrica han ido a la baja en el último año: tan sólo entre el cierre de 2023 y el inicio de 2024 bajaron 45 por ciento, muestran los informes publicados por la Comuna, lo que revela la mala decisión de haberle entregado los recursos a una entidad financiera de dudosa reputación.
De hecho, la tendencia a la baja en los rendimientos no es de ahora y se ha mantenido así desde el comienzo del año pasado, porque las cantidades han disminuido 29.2 por ciento en el primer trimestre, 3.1 por ciento en el segundo y 34.8 por ciento en el tercero. Sin bien el último trimestre aumentaron, la “ganancia” no logró revertir la caída que, en el balance, registra desde el cierre de 2022.
Así, los casi mil 300 millones de pesos del llamado Sistema Individual para el Retiro y Jubilación Municipal (Sirjum), ya no sólo están en riesgo porque se quedaron en manos de la entidad financiera, tras la decisión del Ayuntamiento de denunciar manejos fraudulentos del dinero que al entonces alcalde Renán Barrera decidió depositar ahí, a espaldas de los trabajadores, sino que no están creciendo como se pensó.
Como informamos ayer, Barrera Concha heredó a Cecilia Patrón Laviada una bomba de tiempo porque el capital que los trabajadores aportan está “congelado” tras el litigio judicial que la Comuna inició contra Bursamétrica, una Casa de Bolsa en los últimos años fue involucrada en fraudes millonarios como en el de Segalmex.
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Respecto a este caso, el diputado federal Óscar Brito le pidió a la actual Alcaldesa de Mérida que tomara cartas en el asunto y se pronunciara sobre los pasos a seguir no sólo para recuperar el dinero sino también para fincar responsabilidades a quienes decidieron cambiar el dinero de los trabajadores de las arcas seguras de un banco a las de una casa de bolsa con antecedentes de quebrantos financieros.
POR ESTO! dio cuenta ayer de que, con la denuncia, Barrera Concha aceptó tácitamente su culpa de mover de Banamex a Bursamétrica el dinero de los empleados municipales, quienes ahora tendrán que esperar años para recuperar sus recursos. Será ahora la nueva Alcaldesa quien tendrá qué responder por el caso, aunque hasta ahora no se ha pronunciado al respecto.
Brito Zapata recordó que el Sirjum, creado en 2001 para garantizar la seguridad financiera de los burócratas, fue movido de institución financiera precisamente un día después de que Renán Barrera solicitara licencia para contender por la relección en el Ayuntamiento de Mérida, en 2021.
A pesar de que el movimiento del dinero fue cuestionado por regidores de oposición, porque ya se sabía de los fraudes en que estaba involucrada Bursamétrica, el Ayuntamiento encabezado por Alejandro Ruz Castro, alcalde interino, se hizo al sordo, pues debía cumplir la orden de su jefe, Barrera Concha.
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No fue sino hasta hace unos días que la Dirección de Tesorería y Finanzas del Ayuntamiento “descubrió que había movimientos irregulares en las inversiones realizadas por esta casa de bolsa”, según explicó el legislador morenista, y presentó denuncias. Sin embargo, no tomó en cuenta que el dinero de los trabajadores se quedaría “congelado”: el regidor Oscar Medina Cruz, advirtió de una cláusula del contrato aprobado por el Cabildo de Mérida en la administración 2018-2021 que señalaba que en caso de una querella el fiduciario estará facultado para retener el patrimonio hasta que haya una sentencia final y definitiva.
Brito Zapata exigió a Patrón Laviada definir su postura ante un caso que es de interés público para todos los meridanos, pues la capital yucateca “merece un Gobierno que proteja a sus trabajadores, no que negocie con su bienestar”.
Como también informamos, detrás de la casa de bolsa Bursamétrica está el empresario yucateco Roberto Guzmán García, vinculado a fraudes financieros y estafas a varias instituciones como la Universidad Autónoma de Tamaulipas; el SNTE, y Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios.
POR ESTO! revisó los estados financieros publicados por el Ayuntamiento de Mérida sobre el manejo del fondo de pensiones de los burócratas municipales y encontró que los rendimientos de que supuestamente Bursamétrica no han sido los esperados, pues desde el cierre de 2022 han registrado bajas considerables.
Por ejemplo, entre el último trimestre de 2022 y el primero de 2023, hubo una caída de 29.2 por ciento, que significó 8.7 millones de pesos (mdp) menos, al pasar de 29.8 a 21.1 mdp. Al siguiente semestre, volvió a bajar, al registrar 20.4 mdp. En el periodo julio-octubre, la caída fue estrepitosa: 34.8 por ciento, unos 13.3 mdp.
Si bien en el último trimestre se captaron 34.5 mdp de rendimientos, lo que significó un incremento, en el primer trimestre de 2024 los créditos cayeron 45 por ciento, unos 18.9 mdp, es decir, que lo “ganado” no logró recuperar lo perdido desde el inicio de 2023.
GC