Un distraído peatón que bajó del autobús de la ruta 60 penal, precisamente frente a las instalaciones del Centro de Reinserción Social, acompañado de su pareja, al tratar de cruzar el arroyo vehicular fue atropellado por una moto-taxi, quedando tirado en medio de la calle.
Prácticamente el joven fue quien se aporreó contra la carrocería del vehículo de 3 llantas, puesto que las huellas del impacto se registraron en el costado izquierdo de la unidad, quedando abollada la lámina que protege a los pasajeros.
El conductor del moto-taxi detuvo su marcha y se estacionó a un lado del costado derecho de la calle, en tanto el peatón estaba tendido en la caliente carpeta asfáltica, acusando dolor en la pierna derecha y tobillo del mismo lado, presentando a su vez heridas cortantes en el antebrazo derecho.
La señora que cuida vehículos en esa zona se encargó de poner unos conos para alertar a los conductores que había una persona lesionada tirada en la calle, su pareja estaba inclinada a su lado y por medio de su celular solicitó la presencia de una ambulancia para que lo valoren y si era necesario su traslado a un hospital.
Pasaban los minutos y ni siquiera se asomaba por el lugar una patrulla, a pesar de que a escasos 200 metros se encuentra la Base Sur de la Secretaría de Seguridad Pública y que en el penal de Mérida hay una guardia permanente de elementos uniformados.
Finalmente se asomó una camioneta de la policía uniformada, se estacionó y descendió un policía que le preguntó dónde le dolía y con la ayuda del moto-taxista lo cargaron y lo acomodaron en la acera del edificio del Centro de Justicia Oral de Mérida, para luego tomarle sus datos personales, así como también los del conductor del vehículo TVS con placa WDJ3S.
Los hechos se registraron el pasado domingo, alrededor de las 12 del día y una hora después llegó una ambulancia para auxiliar al lesionado.
Los elementos de la policía llegaron a bordo de la unidad 6186, que se encargaron de tomar nota de lo ocurrido para el deslinde de responsabilidades, aunque los testigos señalaron que el joven bajó sonriente del camión y trató de cruzar la calle sin fijarse que venía el moto-taxi y prácticamente se estrelló contra el vehículo.
Cabe destacar que por ser domingo el tráfico vehicular en ese sector es fluido, por ser día de visita en el penal y el joven corría el riesgo de ser aplastado al permanecer por largos minutos tirado a media calle.
(Armando Gamboa Romero)