Vecinos del rumbo del fraccionamiento Francisco Villa Oriente señalaron que ninguna autoridad hizo caso de las denuncias anónimas que se levantaron hace días cuando se enteraron de que la bodega que explotó el 31 de diciembre almacenaba pirotecnia de manera clandestina.
De algún modo se sabía de la existencia de esa bodega, pero la Unidad Municipal de Protección Civil de Kanasín, que es la directamente responsable del asunto, no reportó si la revisó o si la inspeccionó para saber si contaba con medidas de seguridad y evitar algún siniestro.
En tanto se recomendó a la familia Ciau Ek, que perdió su vivienda tras la explosión, que presente una denuncia contra quien resulte responsable ante el Ministerio Público a fin de que le sean reparados los daños a la casa.
La bodega era clandestina, habilitada como almacén de pirotecnia por gente que, en vez de cumplir con las leyes, prefirió guardarla en un municipio como Kanasín, el cual lamentablemente carece de una reglamentación como hay en la capital.
Se les hizo fácil almacenar pólvora en un predio de un municipio donde nadie revisa, pero cerca de Mérida para poder movilizarla de manera rápida y comercializarla en la capital en estos días en los que la demanda se incrementa por los festejos de fin de año.
Llamado
Por otra parte, en redes sociales se hizo un llamado para ayudar a la familia Ciau Ek con ropa, víveres, dinero, leche e incluso material de construcción. La organización Red Animal Yucatán convocó a través de Facebook a donar víveres y ropa a las personas del predio contiguo de la calle 6-A por 65-D.
“Se requiere de su apoyo, ya que perdieron todo”, indica la publicación, que precisa que de los seis menores que estaban en el predio, tres tuvieron que ser hospitalizados.
La Red Animal Yucatán pidió entregar “lo que les nazca del corazón”, entre ellos ropa de mujer y hombre (los que se ven en la foto), así como de una niña de siete años y otro de ocho. Además, enlistó productos como pañales desechables y leche en polvo (NAN etapa 1).
Todo lo recaudado podrá ser entregado directamente a los afectados en la calle 65-C No. 272 entre 6 y 8, en una casa color rosa ubicada en la esquina, frente a una tienda.
Como POR ESTO! dio a conocer, la explosión se registró minutos antes de las 19 horas y un hombre mayor –que permanece sin identificar– murió al instante debido a la explosión y posterior incendio y derrumbe del predio que funcionaba como bodega clandestina de pirotecnia.
Hasta ayer por la tarde todavía se podía ver una intensa movilización policíaca, así como del Ejército Mexicano y de la Policía Estatal de Investigación, cuyos elementos trabajan para determinar la causa precisa del incidente que conmocionó a los meridanos en el último día del 2019.
(Rafael Gómez Chi)