Un veterano bolero fue encontrado sin vida la tarde de ayer en su casa de la calle 61 con 90 de la colonia Bojórquez, en el Poniente de Mérida.
Las autoridades ministeriales activaron el protocolo COVID, debido a que según los reportes de los vecinos, presentaba síntomas de la enfermedad.
El ahora occiso tenía 75 años de edad y vivía solo, por lo cual a pesar de que llegaron representantes de dos funerarias, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense, ya que no había nadie que pagara los servicios fúnebres y cremación.
Según vecinos, la última vez que vieron con vida a Milo, como se le conocía, fue el lunes alrededor de las 3 de la tarde. Presentaba fiebre y tos, por lo cual sospechaban que la muerte habría ocurrido como consecuencia de la enfermedad.
El fallecido trabajaba desde hace unos 40 años como bolero en la Plaza Grande, se ubicaba en el costado Sur. Durante el cierre del zócalo, como consecuencia del coronavirus, los vecinos lo apoyaban; sin embargo, tras la reapertura en noviembre pasado regresó a trabajar, así que creen que quizá ahí adquirido la enfermedad.
Ayer, alrededor de las 5:30 de la tarde, uno de los vecinos sintió un fuerte hedor que salía de esa casa, por lo que junto con otro se acercaron a la ventana de la puerta para acechar.
Relataron que vieron que estaba recostado en la hamaca, pero no se movía y sobrevolaban moscas en el lugar. Ante esa situación dieron parte a la Policía y en respuesta acudió una patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública, los agentes ingresaron al predio y encontraron el cadáver en avanzado estado de descomposición.
Tras las diligencias correspondientes, el cadáver fue levantado y trasladado al Semefo, fueron colocadas sellos de clausura en la puerta principal del inmueble.
De acuerdo con agentes ministeriales, los sellos se colocaron, no porque haya ocurrido en hecho violento, sino como medida precautoria para que nadie ingrese hasta que transcurra un determinado tiempo y el lugar se desinfecte, ya que el occiso presentó síntomas de coronavirus.
El miércoles fue muy movido en cuanto a decesos se refiere, ya que con este hecho sumaron cuatro en el Estado, tres ocurridos en Mérida, y un turista de origen francés que se ahogó en un cenote de Valladolid.
Respecto al turista muerto en Valladolid, era una persona de 68 años de edad, quien se ahogó en el cenote de la hacienda San Lorenzo Oxman, a unos dos kilómetros de la cabecera municipal, rumbo a Chichimilá. Según testigos, el ahora fallecido se metió al agua al parecer sin saber nadar y sin salvavidas.